El Puerto de A Coruña ganó 5,3 millones en su mejor año, pero pagó 7,4 por la losa de su deuda
La Autoridad Portuaria de la ciudad herculina mantiene, a pesar de su crecimiento durante 2022 y su posicionamiento como futuro hub de empresas de construcción offshore y energías verdes, una deuda a largo plazo con Puertos del Estado y el BEI de 280 millones
Imagen del Puerto Exterior de A Coruña en Punta Langosteira
Cara y cruz de la misma moneda en el puerto de A Coruña. La Autoridad Portuaria que preside Martín Fernández Prado alcanzó en 2022 su gran ejercicio en cuanto a resultados. Los resultados económicos fueron los mejores de toda su serie histórica, con cerca de 32 millones de cifra de negocio, beneficios de 5,3 millones de euros y generación de efectivo por encima de los 16 millones. Sin embargo, eso no se traduce en una reducción notable de su ingente deuda, derivada de la construcción del puerto exterior de Punta Langosteira. A finales del pasado año, aún sumaba unos 280 millones de euros de deuda a largo plazo y, además, abonó 7,4 millones, sin contar intereses, por los créditos que en su momento recibió tanto de Puertos del Estado como del Banco Europeo de Inversión.
Lo cierto es que al ente portuario se le prevé un futuro prometedor en cuando a facturación debido a los proyectos de ocupación en marcha en Langosteira. Solo en lo que tiene que ver con la construcción de componentes de eólica marina ha recibido la solicitud de hasta nueve compañías distintas, entre las que se encuentran gigantes como Navantia, Acciona, Cobra o Ferrovial. Además, está en el punto de mira de la multinacional naviera Maerks para su proyecto de hidrógeno verde en España, así como de otras empresas en este ámbito, de Blackstone a Ignis.
Sin embargo, estos proyectos aún tardarán unos años en materializarse y, mientras tanto, la entidad tiene que hacer frente a la devolución de unos créditos que abrió en la ciudad desde hace años el debate de si era posible que el Estado condonase, al menos, parte de los mismos.
El balance del puerto
Pero, ¿cuál es la foto fija del balance de la Autoridad Portuaria de A Coruña en 2022? La cifra de negocios se estiró de los 25,5 millones de euros de 2021 a 31,9 millones de euros (claro está, la gran mayoría, 30,9 millones, son de intereses portuarios). Con unos activos de 788 millones y un patrimonio de 425 millones, el resultado de explotación, el propio del negocio, fue de 7,7 millones frente al negativo de 543.000 euros de 2021. Con un beneficio neto de 5,3 millones, el ente portuario logró, este año sí, darle la vuelta al calcetín, frente a las pérdidas de 1,7 millones de euros de doce meses antes.
Pero además de abonar unos intereses de 766.000 euros el pasado ejercicio, según su último balance de resultados, acometió un pago de 3,49 millones de euros derivado de su deuda con entidades de crédito y de 4 millones con “empresas del grupo”. A finales del pasado año, atendiendo solo a sus deudas a largo plazo, presentaba un pasivo de 90 millones de euros con el Banco Europeo de Inversión y de 189,8 millones de euros con Puertos del Estado.
El vencimiento del periodo de carencia con el BEI se produjo en 2013. Desde entonces hasta ahora, el puerto coruñés afronta un pago de casi 3,5 millones de euros que amortiza cada año. Según su última memoria, si nada varía, a partir de 2026 esa cantidad subiría hasta los 7,2 millones.
En 2011, Puertos del Estado, dependiente del antiguo Ministerio de Fomento, concedió a la autoridad coruñesa un préstamo de 250 millones de euros destinado a financiar parte de los trabajos en Langosteira. Dicho importe se redujo, posteriormente, hasta los 200 millones de euros. Si no se alcanzan acuerdis, el pago del préstamo está fijado en un periodo de 30 años (tuvo una década de carencia). La primera cuota comenzó a pagarse en diciembre de 2021. Al principio, la entidad acometió un pago de 2 millones de euros anuales que se elevó el pasado ejercicio a cuatro millones y que se mantendrá así, previsiblemente hasta 2027.
