El presidente de Pharma Mar y el coronavirus: de la expectativa a la polémica

Para bien y para mal, el coronavirus ha marcado los dos últimos años la imagen mediática de Pharma Mar, la biofarmacéutica de José María Fernández de Sousa. La antigua Zeltia figura en los papeles de la Operación Jenner, una investigación a gran escala sobre falsos vacunados contra el coronavirus . Según El Periódico, el nombre del presidente de la cotizada figura en la lista de la investigación que ha llevado a cabo la Policía Nacional.

Sin embargo, curiosamente, la lucha contra el coronavirus disparó en 2020 las expectativas de la compañía, que voló en el mercado continuo y acabó dando el salto al Ibex a finales de ese año. Fue debido, en buena medida, a cómo los inversores acogieron su medicamento Aplidin, un antitumoral reconvertido a antiviral que podría evitar la replicación del coronavirus en pacientes ya infectados.

El medicamento aún está en fase de ensayo clínico y, precisamente, la aparición de las vacunas frenó su tirón en bolsa, debido a que la inmunización hizo que los casos de coronavirus con necesidad de atención hospitalaria disminuyesen.

Aplidin, la cura para el presidente

El Aplidin siempre ha semejado una apuesta personal del propio Fernández de Sousa, que llegó a comentar, en una entrevista concedida a El Español, que fue tratado con el cuando se contagió de coronavirus.

Según contó el presidente de la farmacéutica después de haber dado negativo en una prueba de antígenos pidió a su filial Genómica -que se dedica precisamente al área del diagnóstico-que le hicieran un test que resultó ser positivo y con “una carga viral altísima”.

A partir de ese momento, Fernández de Sousa se puso en manos de los médicos del Hospital Quirón. Aunque no tenía “mucha fiebre ni dolor de garganta” y prácticamente no tenía tos, sí que tenía “la garganta ulcerada” algo que le provocaba muchas molestias. “Nunca había sentido un dolor así en mi vida”, recordó el directivo.

Con el paso de los días aumentó la preocupación del equipo médico por sus niveles de saturación en sangre. En ese momento, el equipo médico le ofrece la posibilidad de tratarse con su propio medicamento, Aplidin. «No me lo pensçe y firmé el consentimiento informado», dijo. 

Recuperación inminente

Según Fernández de Sousa, la recuperación con Aplidin se produce en cuestión de 12 horas. Las úlceras en la garganta desaparecieron y el oxígeno volvía a índices normales. “La saturación me había subido a 95. Podía hablar, beber y comer”. Después de recibir el fármaco durante sábado y domingo, recibió el alta hospitalaria. Entre el viernes y el lunes, los linfocitos (que estaban en niveles muy bajos) se multiplicaron por tres y la proteína C reactiva (que es el indicador de inflamación por Covid) cayó siete veces.

Casi 30 millones de inversión

Desde 2020, la compañía ha invertido casi 30 millones de euros en investigaciones relacionadas con el fármaco. En el último trimestre, 5,3 millones de euros, que se suman a los 19 millones de euros que la compañía destinó a lo largo de 2021 y a los 5 millones que invirtió en 2020.