El Popular activa la macroampliación tras un ‘roto’ de 500 millones que asumió por el Pastor
El agujero reconocido en el banco gallego absorbido equivale a una quinta parte de la ampliación de capital anunciada por Ángel Ron
Casi 500 millones. Ese es el ‘roto’ que reconoció el Banco Popular en 2013, meses después de la compra del Banco Pastor. Entonces, la entidad presidida por Ángel Ron pagó 1.246 millones de euros por un banco cuyo valor neto era negativo en 497,1 millones, una cantidad que representa la quinta parte de la nueva ampliación de capital con la que el Popular trata de mantenerse a flote en solitario.
Así lo admitió la entidad en respuesta a un requerimiento de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para explicar el tratamiento contable de la operación de compra. En él, situaba el exceso de precio sobre el valor contable en 1.743 millones, después de descontar los intangibles –la marca Banco Pastor, que valoró en 47,9 millones, y las relaciones con clientes, que cifró en 195,6 millones– y los 938 millones en activos fiscales generados por las pérdidas en la limpieza del balance.
Garantías
Esa limpieza, que acometió a pulmón, sin ayudas públicas, ascendió a 3.343 millones de euros y se centró fundamentalmente en la cartera de crédito, valorada en 2.683 millones, y en los activos inmobiliarios: 853 millones. La ampliación de capital que llevó a cabo en 2012 sirvió en parte para cubrir este proceso.
La CNMV también había pedido al banco que garantizase que los beneficios futuros serían suficientes para compensar las bases imponibles negativas, lo que el Popular justificó con su plan de negocio, en el que las ganancias de los años sucesivos permitirían absorber los activos fiscales en un plazo de ocho años. Sin embargo, el banco ha tenido que recurrir a una nueva ampliación para responder por ese agujero al no cumplir con las previsiones.
Un banco nuevo
Una vez depurados los activos tóxicos, en abril de 2013 el Popular resucitó el Banco Pastor, una entidad con sede en A Coruña a la que traspasó su negocio en Galicia. El nuevo banco quedó constituido con un volumen de activos de 10.500 millones y una red de 236 sucursales repartidas por todo el territorio gallego.
El nuevo Banco Pastor, cuyo consejo preside José María Arias y que forma parte del Grupo Banco Popular, retomaba así su actividad libre de polvo y paja, con todo lo bueno del negocio (una cuota en el territorio cercana al 20%) y sin los activos problemáticos, asumidos por la matriz.