El gigante Novartis se lanza a por el fármaco fetiche de Pharma Mar
La farmacéutica suiza, que dobla en valor en bolsa a Inditex, aterriza con un fármaco contra el síndrome del ojo seco y eleva la presión contra Pharma Mar
A Pharma Mar le sale un duro competidor en su fármaco para el síndrome del ojo seco. La farmacéutica suiza Novartis desembarca en este segmento con la compra de Xildra a la japonesa Takeda Pharmaceuticals en una operación valorada en 3.040 millones de euros.
El movimiento de Novartis, un gigante del sector con un valor en bolsa de 180.000 millones de euros (más del doble de Inditex) eleva la presión contra Pharma Mar. La compañía tiene en Sylentis (su filial para el desarrollo de terapias en el campo de la oftalmología) una de sus mayores apuestas, tan solo por detrás de los antitumorales Zepsyre y Yondelis (este último ya en fase de comercialización) y que está llamado a compartir protagonismo con el Aplidin (para mieloma múltiple).
La compañía presidida por José María Fernández de Sousa trabaja a contrarreloj para poner su fármaco contra el síndrome del ojo seco en el mercado. Actualmente se encuentra bajo ensayo en un estudio de fase III con el que tiene que convencer al regulador de que ofrece mejoras significativas respecto a los fármacos de este tipo que ya existen en el mercado.
Inversión millonaria en I+D
El propio José María Fernández de Sousa mostró las elevadas expectativas que Pharma Mar tiene depositadas en Sylentis una vez que logre colocar sus fármacos en el mercado. “Sabemos que va a haber compañías que querrán licenciarlo, y por otro, también sabemos de inversores que querrían entrar en el capital de la compañía… A lo mejor es mejor lo segundo que lo primero”, subrayó el presidente de Pharma Mar en la presentación de sus resultados del año 2017.
Según los datos de Global Data, el síndrome del ojo seco ya afecta a 286 millones de personas de Estados Unidos, España, Italia, Francia, Alemania, Reino Unido, China y Japón. Se trata de un mercado que mueve cada año 2.200 millones de dólares (unos 2.000 millones de euros) y que ha llevado a Pharma Mar a realizar un importante esfuerzo en sus laboratorios.
Solo el año pasado la compañía dedicó 5,1 millones de euros en I+D (investigación y desarrollo) para este fármaco (un 3,1% de los ingresos totales de la compañía). Una cifra que, en todo caso, se queda pequeña frente a los 63,7 millones de euros que dedicó para su rama oncológica.
¿Parón para centrarse en los antitumorales?
Pese a la venta de Xylazel (su filial porriñesa de pinturas y barnices) a la holandesa AkzoNobel y de buscar comprador para Zelnova Zeltia (su división de ambientadores e insecticidas también con sede en Porriño) para obtener liquidez, la compañía no cierra la puerta a nuevos ajustes para poder sufragar los cuantiosos gastos de investigación para sus antitumorales.
El grupo, segun asegura en su memoria anual, “tiene identificadas una serie de actividades, referidas a negocios no oncológicos que, si fuera necesario, podrían posponerse sin perjudicar la parte central del negocio, lo que le da la flexibilidad suficiente para adaptar las necesidades de inversión a los recursos disponibles de una forma ágil”. Algo que podría obligar a poner en cuarentena el desarrollo de su fármaco contra el ojo seco en el que ahora tendrá que lidiar con la presión de un gigante como Novartis.