El Dépor se refugia en la vía judicial e intenta parar la competición
El club espera saber en "cuatro o cinco días" si la justicia ordinaria acepta la cautelarísima que solicitará para suspender el inicio de competición
La pelea del Deportivo por su permanencia en Segunda División cambia de escenario. El Consejo Superior de Deportes (CSD) ha tumbado las opciones tanto del descenso administrativo del Fuenlabrada como de una hipotética Segunda División de 24 equipos en la próxima temporada, dejando la vía de la justicia ordinaria como única opción abierta para el Deportivo.
El asesor jurídico del conjunto herculino, Óscar Rama, confirmó en la rueda de prensa celebrada este jueves junto al presidente del club, Fernando Vidal, que el club se prepara para emprender una nueva batalla en los tribunales de la mano del Numancia. «Efectivamente, en lo que son las actuaciones que se emprendan en la justicia en relación al calendario y al sorteo, se unirá el Numancia a nosotros. Serán con petición de medidas cautelarísimas con el objetivo de paralizar el comienzo de la competición para no perjudicarnos más», ha avanzado.
«En cuatro o cinco días»
Desde el club esperan tener noticias sobre esta posible suspensión cautelar de la competición en un plazo aproximado de «cuatro o cinco días». Será entonces cuando se confirme oficialmente en qué categoría militará la próxima temporada el Deportivo de La Coruña, que tiene como ejemplo la situación del Gipuzkoa Basket, al que un juzgado de Barcelona le dio la razón y obligó a admitirlo en la Liga ACB, en contra del criterio de la patronal del baloncesto español.
En el caso de que esta opción tampoco prospere, el Deportivo se vería relegado a la división de bronce del fútbol español, pero podría plantearse la opción de mantener su pulso en los tribunales a más largo plazo con la perspectiva de que en un futuro la justicia le dé la razón. Siguiendo los pasos del Caso Obradoiro, que tuvo a los hermanos Vázquez Guillén (Argimiro es ahora consejero del Dépor) como artífices de la victoria en la tribunal, un fallo judicial podría llegar a obligar a la LFP a readmitir al club herculino en el fútbol profesional y, llegado el caso, a tener que poner en marcha una indemnización millonaria.
Golpe económico al Dépor
Y es que el descenso a Segunda División B movería al Deportivo al llamado fútbol no profesional (territorio que no pisa desde hace 40 años) y golpearía principal partida de su cuenta de resultados: los ingresos televisivos. Estos aportaron 10,3 de los 34,8 millones de euros ingresados por el Deportivo en la temporada 2018-19 y para la campaña recién finalizada se esperaba que supusiesen 8,4 de los 21,2 millones de euros que tenía presupuestados el conjunto herculino. Sin embargo, estas cantidades se reducirán previsiblemente hasta situarse por debajo del medio millón de euros ante una Segunda División B en la que ni siquiera todos los partidos son retransmitidos en directo por televisión.
A este golpe económico se suman las posibles reducciones en las cantidades obtenidas tanto por patrocinios, que esta temporada iban a suponer 2,7 millones de euros, pero que ahora pierden atractivo con el descenso de categoría, una circunstancia que el club podría mitigar por el hecho de que el núcleo duro de sponsors se encuentra arraigado a la ciudad y guarda lazos accionariales. Además, el club verá reducida la aportación de los ingresos por abonados y socios. Estaba previsto que esta partida generase 4,83 millones de euros en esta temporada, una cantidad que será revisada a la baja tras la compensación a socios como consecuencia de las restricciones de aforo por el coronavirus. Esta situación está previsto que se prolongue al menos durante la parte inicial de la próxima campaña, lo que, unido a una previsible bajada de precios por el descenso de categoría, provocará un descenso en la recaudación.
De esta forma, el Deportivo perderá como mínimo la mitad de sus ingresos tras el golpe de la Liga y el CSD, aunque, a cambio recibirá una cantidad cercana a los 1,5 millones de euros por el seguro por descenso y, además, podrá hacer uso de parte de los cinco millones inyectados por Abanca durante el pasado mes de enero y que no fueron gastados en el pasado mercado invernal.