El aviso de Escotet: «No me quiero imaginar el golpe del descenso»
El presidente de Abanca alertó durante la presentación del préstamo participativo del pasado mes de enero de las dificultades económicas del Deportivo
El Deportivo se enfrenta a un golpe económico sin precedentes tras la negativa del presidente de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), Javier Tebas, a una Segunda División de 24 equipos como solución al caos desatado por la celebración de todos los partidos de la última jornada de competición excepto el del Deportivo.
El impacto negativo que tendría en las cuentas del Deportivo un hipotético descenso a Segunda División B fue alertado por el propio Juan Carlos Escotet hace seis meses. Fue el pasado mes de enero, cuando durante la presentación del acuerdo para el préstamo participativo de cinco millones de euros que permitió al equipo reforzarse durante el mercado de invierno, el presidente de Abanca admitió no haber visto nunca una empresa tan “escarallada” económicamente como el Deportivo y aseguro no querer imaginarse si, llegado el caso, “el equipo descendiese a Segunda B siendo el principal ingreso el que proviene de la televisión».
La necesidad de la capitalización
Las declaraciones de Escotet tuvieron lugar en una rueda de prensa conjunta con Fernando Vidal que se produjo casi una semana después del triunfo del Deportivo en Soria, que dejaba al conjunto herculino a cuatro puntos de la salvación, pero todavía en la última posición de la tabla y con la amenaza del descenso a Segunda B flotando en el ambiente.
El presidente de Abanca admitía las dificultades económicas del Deportivo y ponía una reestructuración de deuda como única opción para hacer al club viable aún en el caso de salvar la categoría. “Si el equipo lograse mantenerse en Segunda División su situación de sostenibilidad mejoraría levemente, aunque con una estructura financiera de este calibre hay que plantearse un plan de negocio que asegure su viabilidad (…). Seré muy claro y muy franco. Esta empresa demanda nuevos recursos propios”, recalcó Escotet.
Según el presidente de Abanca, que la semana que viene podría capitalizar 30 millones de euros de deuda con el Deportivo si así se decide en la Junta General Extraordinaria de Accionistas, la necesidad principal era dotar de recursos propios al Deportivo, que contaba con “73 millones de patrimonio negativo” para “disminuir el monstruo de la deuda” y alertaba: “en Segunda B es todavía mucho más grave el problema”.