El acelerón de Abril: crece en ventas doce veces más que las cinco mayores aceiteras españolas
Aceites Abril se consolida como el sexto mayor fabricante de España tras disparar sus ventas casi un 60% en dos años, lo que le ha permitido superar la barrera de los 300 millones
Imagen de la línea de envasado de Aceites Abril
La ourensana Abril se afianza en el ranking de mayores fabricantes de aceite de toda España. La compañía capitaneada por la familia Pérez Canal se acerca al top 5 del sector a nivel nacional tras recortar distancias con sus competidores desde el año 2019.
Durante estos años, que han estado marcados por la crisis del Covid-19 y de la invasión de Ucrania y la posterior escalada de precios, Aceites Abril ha sido capaz de pulverizar la barrera de los 300 millones de euros de facturación. Así lo revela la firma en sus últimas cuentas anuales (correspondientes al ejercicio 2021), en las que cifra en 315,5 millones de euros sus ingresos.
La cifra representaba un avance de casi el 70% respecto a los 185,9 millones cosechados el ejercicio anterior y del 59,3% sobre los 198,4 millones que se había anotado en 2019, el último año antes del estallido de la pandemia.
De Migasa a Deoleo
De esta forma, Aceites Abril ha logrado meter una marcha más respecto a sus principales competidores en el negocio del aceite en España. Y es que los cinco mayores fabricantes, todos ellos radicados en Andalucía, registraron un repunte de ventas de apenas el 5% entre los años 2019 y 2021.
El que más se acerca a Aceites Abril es Deoleo. El grupo propietario de marcas como Hojiblanca o Carbonell ha logrado dar un empujón a su facturación en un periodo marcado por su acuerdo de refinanciación con los bancos para evitar la entrada en concurso de acreedores. En concreto, su cifra de negocio ha rebotado desde los 561,9 millones de euros alcanzados en 2019 hasta los 703 millones en 2021.
El crecimiento del 25,1% de Deoleo permite a la compañía colarse en un podio del que se ha caído la portuguesa Sovena. A través de su filial en España, que está domiciliada en Sevilla, la compañía ha visto cómo sus ingresos descendían desde los 692 millones de euros de 2019 hasta los 646 millones en 2020 y los 602 millones en 2021.
Entre Deoleo y Sovena se ubica ahora Acesur. El grupo propietario de marcas como La Española o Coosur ha disparado sus ingresos un 22,8% en dos años pese a las turbulencias por la pandemia. Su facturación ha repuntado desde los 534,4 millones de euros hasta los 656 millones y, pese a ver todavía ampliada su diferencia con Deoleo, la compañía sí logra acercarse a las dos principales compañías del sector.
Se trata de Migasa y Dcoop. Esta última, que fue precisamente una de las accionistas de referencia de Deoleo hasta su conflicto por hacerse con una participación mayoritaria en 2014, aprovechó el ejercicio 2021 para recuperarse del bache del Covid-19. No en vano, sus ventas se incrementaron desde los 907 millones de euros de 2020 hasta los 1.021 millones, superando así en un 1,2% sus registros anteriores al Covid-19 (1.009 millones en 2019).
También ha regresado a su punto de partida Migasa. El grupo alimentario propietario de marcas como Ybarra o La Masía se instaló por encima de la barrera de los 1.100 millones de euros tras su bache en 2020. El golpe de la pandemia había llevado a la compañía a bajar de los 1.092 millones de euros en ingresos alcanzados en 2019 hasta los 937,2 millones de 2020.
