DIA llega a Paraguay bajo la sombra de un empresario encarcelado por corrupción
Se asocia con la distribuidora Gloria, fundada por Juan Ángel Napout que fue acusado por lavado de dinero, delitos bancarios y los sobornos de la FIFA
La cadena de supermercados DIA continúa su proceso de internacionalización con la expansión en Brasil y con la apertura de operaciones en Paraguay, donde se asociará con Distribuidora Gloria, una empresa con más de 25 años dedicada a la importación de alcohol y tabaco.
La distribuidora Gloria fue fundada en 1988 por Juan Ángel Napout, un empresario con una dilatada trayectoria profesional en Paraguay que compatibilizó sus obligaciones empresariales con una meteórica carrera de dirigente deportivo.
Napout ascendió hasta las más altas esferas del fútbol en Suramérica al ser designado presidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol, Conmebol y fue condenado a cumplir arresto domiciliario en Miami mientras se celebra el juicio en su contra.
La fiscalía de Estados Unidos lo acusa de pertenecer a una red de crimen organizado, lavado de dinero y delitos bancarios. Napout fue extraditado desde Zürich, Suiza, donde fue detenido, hasta Estados Unidos, donde será juzgado este año.
En Miami logró la libertad con el pago de una fianza de 20 millones de dólares. Hasta agosto del año pasado sólo podía salir de su domicilio estadounidense bajo autorización del FBI. Ahora se encuentra bajo «vigilancia electrónica».
El empresario y ex dirigente deportivo y el resto de acusados por el caso enfrentan penas de 20 años de cárcel.
La expansión sudamericana
Además de la asociación con la distribuidora, DIA se asociará con otra compañía local: la Distribuidora Paraguaya de Alimentos, Dipasa. Las tres empresas tienen previsto la apertura de 22 nuevas tiendas de cercanía durante 2017, pero esperan aumentar esta cifra hasta las 90 tiendas en cinco años, según han manifestado los socios paraguayos de DIA.
La inversión de las empresas locales ascenderá a unos 45 millones de dólares (unos 40 millones de euros) en los cinco primeros años de operaciones. Las empresas no han aclarado si la expansión también recaerá, como se ha hecho en España, Brasil, Argentina, Francia y China, sobre el polémico modelo de franquicias.
DIA afronta una cruzada internacional de franquiciados que han llevado a la compañía a los tribunales por plantear un sistema de negocio abusivo y destinado a estrangular a los franquiciados, según denuncian decenas de damnificados por el negocio en estos países.
Los franquiciados aseguran que son engañados por DIA en un modelo de negocio con el que buscan capitalización. Casi el 20% de las acciones de DIA están en manos de fondos oportunistas en su mayoría estadounidenses.