Deutsche Bank intenta cargar a Sandra Ortega “150 millones” en créditos fraudulentos a Room Mate
El banco cifra en 150 millones los préstamos de la banca a Room Mate que garantizó Rosp Corunna, el holding de Sandra Ortega, y que provocaron la guerra con su ex número dos, José Leyte
Deutsche Bank, la entidad que se querelló contra Sandra Ortega, cifra en más de 150 millones el importe de los préstamos concedidos por la banca a la hotelera Room Mate, pensando que estaban garantizados por Rosp Corunna, el holding de la mujer más rica de España. Ese importe, por tanto, sería el que los distintos bancos acreedores de la cadena de Kike Sarasola habrían otorgado en forma de créditos gracias a las comfort letters o cartas de patrocinio firmadas por José Leyte, histórico número dos de la hija de Amancio Ortega. El apoyo financiero a Room Mate provocó el cese de Leyte y el actual proceso judicial, en el que Sandra Ortega acusa al hasta entonces guardián de su fortuna de falsificar su firma.
Además de Deutsche Bank, entre la banca atrapada en los préstamos a la cadena hotelera concedidos bajo una operativa presuntamente fraudulenta están Abanca, Bankinter y Société Générale. Todos ellos están personados en la causa y pidieron que se investigase también a Sandra Ortega en el marco del procedimiento. Con más intensidad Deutsche Bank, que llegó a presentar una querella contra la accionista de Inditex y Pharma Mar rechazada por el Juzgado de Instrucción número 2 de A Coruña. Las otras tres entidades recurrieron la decisión del juzgado ante la Audiencia Provincial, también sin éxito. EBN o Banca March habrían concedido financiación a la hotelera bajo las supuestas garantías que ofrecía Rosp Corunna.
El dinero de Sandra Ortega y la insolvencia de Room Mate
Antes de que estallase la guerra judicial la empresa de Kike Sarasola ya estaba asfixiada. La hotelera presentaba a cierre de 2019 un patrimonio neto negativo de 50 millones, cuantía similar al rescate que solicitó al fondo de solvencia de la SEPI y que más de un año después continúa pendiente de aprobación. La empresa finalizó ejercicio en quiebra técnica desde, al menos, 2015. Los números rojos se amontonaban antes de que el Covid hiciera descarrillar al sector turístico. Room Mate perdió 7,2 millones en 2015; 10,2 millones en 2016; 8,3 millones al año siguiente, 7,2 millones en 2018 y 10 millones en 2019. Lo único que tenía la hotelera además de números rojos era un plan de expansión y el apoyo de Sandra Ortega, que heredó de su madre, Rosalía Mera, un 30% de la compañía.
Con este balance, las posibilidades de la banca de recuperar sus préstamos parecen pasar por el patrimonio de la mujer más rica de España. Así parece reconocerlo el propio Deutsche Bank en el recurso presentado ante la Audiencia Provincial de A Coruña y que fue desestimado en un auto del pasado 18 de abril: «Esta representación se pregunta para que nos han admitido la personación como perjudicados. Si Rosp, persona jurídica en cuyo seno se ha perpetrado la falsificación de los documentos con los que se ha perpetrado la estafa, no responde ni penal ni civilmente de forma directa ni tampoco de forma subsidiaria y nos tenemos que conformar los bancos perjudicados en más de 150 millones con cobrar de un exempleado, es decir, con cobrar del señor Leyte, para eso no realizamos esfuerzo procesal alguno porque sabemos de antemano que no va a poder hacer frente a los importes estafados», dice la entidad.
La empresa de Leyte no tiene músculo para tanta deuda
Efectivamente, no parece que José Leyte pueda hacer frente a esa deuda en caso de resolución judicial condenatoria. La querella de Sandra Ortega se dirige contra él, su mujer María Teresa Golpe y la empresa de ambos, TG Interiors. Al margen del patrimonio que haya acumulado el exdirectivo, esta sociedad de prestación de servicios apenas tiene músculo financiero. En el balance de 2020 presenta un patrimonio de 242.000 euros, unas reservas de 235.000 euros y activos por valor de 273.000 euros. Es decir, unos fondos propios inferiores 500 veces al importe de los créditos que, según Deutsche Bank, garantizó para Room Mate en nombre de Rosp Corunna.
No es de extrañar que la entidad financiera pugne, hasta ahora sin suerte, por implicar a la fortuna de Sandra Ortega en la garantía de los préstamos. En su querella, de hecho, planteaba que “no es creíble que la administradora única de Rosp no se enterase de la modificación de las garantías” y se quejaba de un «escenario de actuación defraudatoria por parte de la empresaria contra los bancos ahora personados”.
Sandra Ortega, atrapada en Room Mate
La salida de José Leyte de Rosp Corunna provocó que Sandra Ortega designase a José Antonio Fresnedo, que acumulaba años de trayectoria en el grupo, como representante en Room Mate. La intención de la hija mayor de Amancio Ortega era vender 30% que controla de la cadena hotelera, pero por el momento no lo ha conseguido. En todo caso, el procedimiento judicial en curso parece que la obligará a mantenerse ligada a la sociedad de Kike Sarasola durante bastante más tiempo por los créditos que garantizó su ex número dos. Pero no solo por eso. Además de financiadora, Sandra Ortega también es casera de Room Mate en diversos hoteles que aportan unos ingresos por arrendamiento de unos cinco millones anuales a Rosp Corunna.