Despedido el presidente del comité de empresa de Alu Ibérica por «agresiones»
El presidente, Juan Carlos López Corbacho, y otros tres trabajadores han sido cesados por los disturbios ocurridos el pasado 17 de diciembre en la planta de A Coruña
Alu Iberica comunicó esta tarde el despido disciplinario de cuatro trabajadores, todos pertenecientes al comité de empresa incluyendo el presidente y un delegado sindical, por los disturbios sucedidos el pasado 17 de diciembre en la planta de A Coruña.
La empresa ha justificado estos ceses por supuestas «agresiones cometidas contra otros compañeros» durante dicha jornada de protestas, calificando lo sucedido como un «ataque violento» que deja fuera de plantilla al presidente del comité de empresa, Juan Carlos López Corbacho, y a otros tres trabajadores. Alu Ibérica había abierto expedientes sancionadores contradictorios por falta muy grave y ahora, cumplidos los plazos y después de recibir y analizar las alegaciones, la dirección y el equipo legal han determinado que los hechos son susceptibles de despido disciplinario.
«Ahora, después de haberse recibido y analizado las alegaciones de los expedientados y tras haberse cumplidos los plazos legales, la dirección de la empresa y el equipo jurídico han determinado que los hechos son muy graves y, por tanto, susceptibles de despido disciplinario, tal y como se recoge en el convenio colectivo y en el Estatuto de los Trabajadores», explica la compañía.
La versión del comité
Desde el comité de empresa reconocieron, tras el despido de una compañera, que hubo momentos de tensión pero negaron cualquier acción violenta. Días después convocaron una huelga días para exigir la readmisión de esta trabajadora, un paro que dejaron en suspenso recientemente por el contexto de pandemia, según explicaron.
Pese a las versiones contradictorias, la compañía ha hecho efectivos los ceses a los cuatro trabajadores y ha aclarado, además, que «siguen abiertos los procedimientos penales iniciados a raíz de los ataques», en relación a denuncias por parte de «las personas agredidas como la propia empresa».