Defensa pone la mano en el fuego por Hércules de Armamento

El Ministerio de Defensa es claro: «Hércules de Armamento ha cumplido con todas sus obligaciones», al menos sobre el papel, que es lo que cuenta. No obstante, reconocen que esto fue así hasta el lunes, que fue cuando se produjo el abandono de las instalaciones por parte de la empresa encargada de la seguridad, Segur Ibérica, como consecuencia de los impagos de la concesionaria de las instalaciones de la Fábrica de Armas.

Ante esta situación, el Ministerio toma cartas en el asunto. El ingeniero militar destacado en Palavea informa de esta circunstancia a Madrid y, de inmediato, inicia la tramitación del expedinte de suspensión de la autorización para la fabricación de armas. A las pocas horas se le notifica esta decisión a la empresa y se procede a trasladar el armamento que quedaba en las instalaciones a la Delegación de Defensa en A Coruña.

Esperando acontecimientos

Fuentes del Ministerio señalan que el expediente sigue abierto a fin de determinar si lo que a día de hoy es una decisión temporal pasa a ser definitivo. Dependerá en gran medida de que Hércules de Armamento encuentre una nueva empresa de seguridad que se haga cargo de las instalaciones. Si prescinde de este servicio, el fallo de Defensa podría acarrear la retirada permanente de la autorización, lo que a su vez pondría en entredicho el cumplimiento de los compromisos que recoge el pliego y dejaría en el aire la concesión.

En Defensa permanecen «vigilantes» de que se cumplan los términos del acuerdo, pero tienen muy claro que no se pronunciarán sobre cualquier otra cuestión que no tenga que ver con este aspecto. Reconocen que la falta de personal de seguridad es una «situación novedosa», pero que no pueden hacer otra cosa que «esperar acontecimientos», entre ellos el fallo del informe.