De Sandra Ortega a Rodríguez Cebrián: la reforma del Gobierno se carga el 80% de las sicavs
La CNMV estima que unas 1.800 sociedades de inversión de capital variable han decidido darse de baja por el cerco a los 'mariachis', un 80% de las registradas anteriormente
La CNMV pone cifras al cierre masivo de sociedades de inversión de capital variable, las conocidas sicavs de las grandes fortunas que decidieron bajar la persiana ante el cambio normativo del Gobierno para poner cerco a los llamados mariachis. El director general de Entidades de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), José María Marcos, ha explicado este lunes que se han dado de baja unas 1.800 sociedades, aproximadamente el 80% de las registradas antes de la nueva regulación.
La mayoría de ellas han optado en este proceso por la liquidación, lo que en opinión de Marcos, propiciará que una parte importante de su patrimonio vaya a otros instrumentos financieros. Algunos de los más acaudalados inversores gallegos han seguido este camino, transformando o liquidando sus sicavs, como en el caso de Sandra Ortega; el ex director general de Inditex Juan Carlos Rodríguez Cebrián; el que fuera dueño de Azkar, Luis Fernández Somoza; o el promotor Modesto Rodríguez, entre otros.
Desde el inicio del año, estas empresas de inversión, que podrían disfrutar de una baja tributación (1% en el impuesto de sociedades), tienen que cumplir una serie de requisitos para beneficiarse de las ventajas fiscales. Según la nueva normativa, estas entidades deben contar con 100 socios con una inversión mínima de al menos 2.500 euros cada uno y, en el caso de que no alcancen esta condición, tendrán que tributar al 25%. De esta manera, se impide operar con un gran accionista que controle la gran mayoría del capital, hasta más del 99% en algunos casos, y otros que tienen una participación mínima, sistema que empleaba la mayoría de sociedades.
Alza de los fondos de renta fija
Durante su intervención en el XII Encuentro Nacional de la Inversión Colectiva, organizado por Deloitte y la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), Marcos también ha hecho referencia al contexto del mercado y a los retos a los que se enfrenta el sector de la inversión colectiva. En este sentido, ha advertido sobre la comercialización de vehículos de inversión colectiva cerrados a inversores minoristas, y ha pedido que se hagan con garantías, con inversores debidamente informados, y desde el ámbito del asesoramiento.
También ha mencionado el alza de las aportaciones a los fondos de renta fija, un producto sobre el que «se hace necesario enfatizar su adecuada comercialización». El sector de la inversión colectiva ha mostrado una gran resilencia y capacidad para afrontar crisis y retos, y espero que siga así en el futuro, ha dicho Marcos, para quien, la clave para mantener y aumentar la confianza es que el sector alinee sus intereses con los del inversor, buscando productos sencillos y distribuidos correctamente.