De Amancio Ortega a Fernández Somoza: las grandes fortunas de Forbes en Galicia afrontan su sucesión
El proceso de relevo familiar dentro del ámbito empresarial no es exclusivo de Inditex. De hecho, todas las fortunas gallegas presentes en el prestigioso índice tienen en marcha operaciones similares
De todos los procesos sucesorios que se han producido en la empresa gallega, el que ha derivado en más ríos de tinta es, cómo no, el de Inditex y Amancio Ortega. Y eso que solo hace una semana que la textil comunicó ante la CNMV que Marta Ortega, hija del fundador de Zara y Flora Pérez Marcote, será designada presidenta no ejecutiva de la compañía el próximo 1 de abril.
Cotizada con una capitalización bursátil que sobrepasa, en la actualidad, los 92.000 millones de euros, los inversores posan sus miradas sobre el gigante de Arteixo no porque el ascenso de Ortega Pérez coja a nadie por sorpresa (hacía meses que se preparaba y ya habían dado pistas, como sus primeras declaraciones públicas a The Wall Street Journal), sino por la celeridad con la que se abordó en sus últimos compases y, sobre todo, porque este proceso también incluye la salida del grupo de Pablo Isla, hasta ahora presidente. Según contó este medio, una de las claves a tener en cuenta radica en la distancia entre los equipos del ex de Altadis y la familia política del hombre más rico de España.
Sea como fuere, con este movimiento, comienza el proceso efectivo de sucesión empresarial de Amancio Ortega, la primera fortuna de España según la lista Forbes y la número 14 del mundo –si se atiende al índice actualizado a tiempo real de la publicación, que le estima, en estos momentos, un patrimonio de casi 68.400 millones de euros–.
Sin embargo, un rápido repaso por el famoso índice de fortunas patrias evidencia que el clan Ortega no es el único, dentro de la lista de grandes ricos gallegos, que atraviesa un proceso sucesorio.
El discreto imperio de Fernández Somoza
Abonado desde hace años al ranking de Forbes está Luis Fernández Somoza, el empresario lucense fundador de la histórica Transportes Azkar. Este 2021, ocupa el puesto número 69 de los más ricos de España. A pesar de que ha caído ocho puestos en la lista, su patrimonio estimado se ha estirado de 350 millones a 400, según la prestigiosa revista.
A finales del año pasado, y según informó Economía Digital Galicia, el Registro Mercantil daba pistas acerca de la activación del proceso de relevo empresarial. Aunque el ejecutivo, de la misma edad que Amancio Ortega (85 años), se mantiene como presidente de Carteson, la cabecera patrimonial de sus sociedades, una de sus hijas, Belén Fernández Paradela, fue nombrada administradora única de su principal brazo inversor, Subel.
La clave está en la firma
Al igual que ocurre en el imperio Inditex, la discreción es marca de la casa de los de Fernández Somoza. No hay declaraciones al respecto (por no haber, apenas hay declaraciones públicas), pero fuentes del entorno del empresario, natural de la parroquia lucense de San Pedro de Calde, indica que los nombramientos forman parte de un relevo generacional que lleva años en marcha, ya que el ejecutivo se ha ido apartando paulatinamente del día a día de algunos de sus negocios.
Un dato evidencia la puesta en marcha del relevo empresarial. Las cuentas de Inversiones Subel correspondientes al ejercicio 2020 y depositadas ante el Registro Mercantil están firmadas, por vez primera, por Belén Fernández Paradela. Las de Carteson sí cuentan con la firma de Luis Fernández Somoza en calidad de presidente.
Con un patrimonio de 346 millones de euros y unos activos por encima de los 465 millones, Carteson cerró el ejercicio de la pandemia con unos beneficios de 2,1 millones de euros, ligeramente por encima de los dos millones acuñados el ejercicio prepandémico.
La nueva etapa de la familia Jove
En la lista española de Forbes también ocupa un lugar destacado la familia Jove, que el pasado año abordó un proceso de sucesión obligada, debido al fallecimiento de Manuel Jove. Sus herederos e hijos, Felipa y Manuel Ángel Jove, son otros de los ejecutivos gallegos que figuran en la lista Forbes, concretamente en el puesto número 48, al que cayeron este 2021 desde el 42 a pesar de que la publicación estima que su fortuna se ha incrementado hasta los 600 millones de euros cada uno.
El discreto proceso de sucesión empresarial en Inveravante se activó en junio de 2020 con el nombramiento de Manuel Ángel como presidente del holding levantado por su padre. El ejecutivo asumió la presidencia del grupo por un periodo de dos años, en un movimiento que propiciará la alternancia con su hermana Felipa, que además del cargo de vicepresidenta asumió la presidencia de las juntas generales de accionistas.
Las cuentas consolidadas del holding correspondientes al año de la pandemia arrojaron unas pérdidas netas de 47,4 millones de euros. Entre otras cuestiones, el resultado se vio penalizado por la valoración de los instrumentos financieros, que provocaron deterioros contables por valoración de 29,4 millones de euros, así como por pérdidas cambiarias muy significativas, especialmente por el real brasileño, que ascendieron a 35,7 millones. El resultado de explotación, no obstante, ascendió a 65 millones de euros, un 32% más que en 2019.
Relevo en el acero gallego
Aunque ya no figuran en Forbes, unos ilustres exabonados que también pasan por un proceso de relevo generacional son los Freire Arteta, dueños del imperio siderúrgico Megasa. El pasado octubre, el Registro Mercantil daba cuenta del ascenso Lucía Freire, hija de Enrique Freire Artera, quien es la nueva presidenta de Metalúrgica Galaica SA, una de las principales sociedades del grupo, encargada de comercializar la producción que Megasa genera a través de sus plantas productivas en Narón, Zaragoza y Portugal.
Fuentes cercanas a la compañía explican que, si bien José Enrique Freire sigue llevando las riendas de la misma, hace “ya años” que se inició un «reposado» proceso de relevo familiar.
Los dueños de la primera siderúrgica de Galicia estuvieron presentes en la lista Forbes hasta 2016, ejercicio en el que se les atribuyó una riqueza que rondaba los 1.100 millones de euros. Desaparecieron del índice un año después, debido a un cambio metodológico en el ranking, que comenzó a analizar la riqueza individual, desagregada de la familia, a través de sus sociedades patrimoniales. Se presupone que su salida no es nada que haya quitado el sueño a los Freire, teniendo en cuenta que no hay ni declaraciones públicas ni fotos de los mismos.
A pesar de todo, las cuentas consolidadas de su holding, Bipadosa, revelan la envergadura del negocio de estos empresarios con base de operaciones en Narón. La sociedad cerró el ejercicio 2020 con un patrimonio neto de 955 millones de euros y una cifra de negocio de 1.276 millones de euros, un 6,7% menos. El resultado neto fue de 23,4 millones de euros, un 48% por debajo de las cifras prepandémicas. Eso sí, el grupo afrontó el Covid sin tener que recurrir ni a créditos ICO ni a ERTEs.