Crisis energética: un tercio de los barcos que llegan a Reganosa proceden de Rusia

Más curvas para los mercados de materias primas. El alargamiento de la guerra entre Rusia y Ucrania ha dado el enésimo empujón a la espiral inflacionista en el petróleo, el gas natural, el aluminio, el carbón y metales como el níquel. El barril de crudo Brent ha vuelto a acechar el nivel de los 125 dólares por primera vez desde la primavera de 2012 (hace casi diez años) mientras que los futuros de gas natural para el mes de abril que se negocian en el hub de Róterdam (los TTF) han marcado máximos históricos de 345 euros el megavatio/hora.

La invasión de Ucrania por parte de Rusia ha impactado de lleno en la cotización de materias primas como el gas natural del que España ha hecho acopio en los últimos meses para esquivar posibles cortes de suministro y subidas de precios como las actuales. Solo entre los meses de septiembre y octubre del año pasado se celebraron dos subastas extraordinarias en las que se adjudicaron un total de 45 slots.

La influencia del gas ruso

De esta forma, las seis plantas regasificadoras españolas (las de Mugardos, Bilbao, Barcelona, Sagunto, Huelva y Cartagena) han recibido una capacidad extra para recibir 45 metaneros adicionales. Son casi el doble que los 25 que recibieron las instalaciones mugardesas de Reganosa a lo largo de un 2021 en el que transformó y volcó a la red el gas natural descargado por un total de diez barcos rusos procedentes de Rusia.

Se trata de una cifra superior a los siete que llegaron procedentes de Estados Unidos y a los cuatro de Nigeria, que componen el podio de principales países de origen de los barcos que atracan en el muelle de Reganosa bajo encargo de clientes como Endesa o Naturgy. Las cuatro embarcaciones restantes procedieron de Egipto, Trinidad y Tobago, Angola y Guinea Ecuatorial.

Mismas descargas que el año pasado

Esta estrategia de acopio de gas natural licuado que Enagás ha orquestado en los últimos meses se ha dejado notar en las cifras de descargas de metaneros en las plantas regasificadoras españolas. Estas pasaron de recibir 16 buques en noviembre de 2020 a 24 en el mismo mes de 2021 mientras que en diciembre repuntaron de 17 a 31. La tendencia ha continuado en el arranque de 2022. En enero escalaron de 19 a 26 los metaneros que recalaron en estas instalaciones en las que se transforma esta materia prima de estado líquido a gaseoso para su posterior inyección en el sistema gasista.

Este aumento de las descargas de metaneros en las seis plantas regasificadoras españolas no se ha hecho notar por el momento en la de Reganosa en Mugardos. Sus instalaciones recibieron a cuatro buques en noviembre y diciembre (frente a los seis registrados en el mismo periodo de 2020) y otros dos en enero. Se trata de una cifra idéntica a la registrada en el mismo mes del año pasado, si bien la carga descargada en sus tanques ha sido un 19,8% inferior (2.054 gigavatios/hora).

Según ha podido saber Economía Digital Galicia, Enagás tiene programada la llegada de cinco nuevos metaneros a las instalaciones de Reganosa entre los meses de marzo y abril. Se repite el mismo número que en 2021, aunque con diferente reparto. Y es que dos de estos buques lo harán en marzo (frente a los tres de 2021) mientras que los tres restantes realizarán la descarga en abril (uno más que el año anterior).

«España tiene garantizado el suministro de gas natural»

Ante la tormenta desatada en los mercados de materias primas, la propia Enagás lanzó un comunicado el día en el que se consumó la invasión de Ucrania en el que explicaba que «España tiene garantizado el suministro de gas natural para los próximos meses».

Según la firma presidida por Antonio Llardén y que tiene a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y a Pontegadea (brazo inversor de Amancio Ortega) como máximos accionistas, «el sistema gasista español cuenta con unos niveles de capacidad contratada de gas natural superiores a la de inviernos anteriores». Tras asegurar que España se «encuentra en una situación mejor que la de otros países del entorno», desde Enagás subrayaban que «con la situación a día hoy y con las reservas de slots y capacidad ya realizadas por los comercializadores, no hay indicios objetivos de una situación de falta de suministro gasista en los próximos meses».