Covid-19: la OMS tumba uno de los fármacos rival del Aplidin
La OMS suspende temporalmente los ensayos clínicos de la hidroxicloroquina, competidora del Aplidin, al detectarse un alto índice de mortalidad
La Organización Mundial de la Salud corta el paso a los tratamientos con hidroxicloroquina. Así lo ha confirmado su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus, que ha anunciado la decisión de forzar la detención temporal de los ensayos clínicos en marcha con este fármaco al haberse detectado un mayor índice de mortalidad en estos enfermos.
La decisión, una medida de cautela que podría ser revisada, se ha tomado tras la publicación el pasado viernes en la revista médica The Lancet de un estudio en el que se señalaban mayores tasas de mortalidad en pacientes en los que se habían ensayado tratamientos con hidroxicloroquina.
Se trata de un fármaco inicialmente ideado para tratar la malaria, pero que en los últimos meses se había erigido en una de las alternativas para combatir el coronavirus y el propio presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que lo estaba consumiendo de manera preventiva para evitar un posible contagio por coronavirus.
De la hidroxicloroquina al Aplidin
La hidroxicloroquina era, junto al Remdesivir, uno de los fármacos sobre los que más expectativas había depositadas de cara al tratamiento del Covid-19, una carrera en la que también está presente Pharma Mar, que este mes de mayo inició los ensayos clínicos con el Aplidin.
Al igual que la hidroxicloroquina, el fármaco fue inicialmente ideado para tratar otra enfermedad (el mieloma múltiple), pero, a diferencia del resto, el Aplidin no actúa sobre el coronavirus, sino sobre la proteína eEF1A, presente en el organismo y que es utilizada por el Covid-19 para su propagación.
Tras obtener unos resultados satisfactorios en las pruebas in vitro, la compañía testa el fármaco en 27 pacientes de tres hospitales madrileños en un estudio de fase 1 con el que se busca probar la eficacia del fármaco y lograr su aprobación definitiva, algo que según los cálculos de la propia firma no se producirá hasta, como mínimo, el próximo invierno.