Copasa se aferra a los nuevos contratos para superar el golpe del Covid: 15 millones en pérdidas
La constructora ourensana cierra 2020 con números rojos por el golpe del Covid-19 y el parón del AVE a La Meca, pero mantiene en la recámara contratos por valor de 1.816 millones de euros
Copasa encaja el golpe del Covid-19 y cosecha los primeros números rojos de su historia. La constructora ourensana ha cerrado un ejercicio 2020 marcado por la pandemia con unas pérdidas de 14,9 millones de euros y una caída de ingresos del 11,3% como consecuencia, fundamentalmente, del parón obligado en el AVE a La Meca.
Y es que la compañía ha visto reducida su facturación en Oriente Medio desde los 51,1 millones de euros alcanzados en 2019 hasta los 15,7 millones de 2020 tras acusar la decisión de la Autoridad de Transporte Público (TGA) de Arabia Saudí de mantener sin actividad durante más de un año esta infraestructura ferroviaria que fue construida y ahora operada por un consorcio de 12 empresas españolas y dos saudíes.
El AVE a la Meca permaneció cerrado entre el 21 de marzo del año pasado y el pasado 30 de marzo, fecha en la que se restableció la circulación bajo una limitación del número de plazas a 200 viajeros por tren. “Los problemas puntuales operacionales relacionados con retrasos de algunas obras han llevado a una reducción de ventas y, por tanto, a la reducción de los resultados de explotación, destacando la interrupción del servicio de pasajeros del AVE Medina-La Meca y los trabajadores de operación y mantenimiento de vía previstos”, asegura la compañía ourensana en la memoria anual que depositó este mismo martes en el Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF).
Copasa se hace fuerte al otro lado del Atlántico
La firma presidida por José Luis Suárez, que había ganado 9,8 millones de euros en 2019, destaca que el golpe del Covid-19 se hizo notar con menos intensidad en España. La razón es que la construcción se consideró actividad esencial, algo que, sin embargo, no le impidió sufrir un recorte de ingresos desde los 187,7 hasta los 143 millones de euros.
La evolución en su país de origen contrasta con el nuevo avance que se ha apuntado en América del Sur. Copasa ha disparado sus ventas desde los 69,5 hasta los 96,2 millones en un continente en el que se ha hecho fuerte con su macrocontrato en alianza con la también gallega Espina Obras Hidráulicas. Ambas firmas se adjudicaron bajo el paraguas de un consorcio que lidera Copasa el diseño, construcción y operación de la carretera Ruta 14 Centro-Oeste en Uruguay, que cuenta con casi 300 kilómetros de longitud. El contrato está valorado en 376 millones de euros e incluye la concesión por un periodo de 20 años.
Además, Copasa ha abierto camino en un territorio también al otro lado del Atlántico que hasta ahora le resultaba prácticamente desconocido. Se trata de Estados Unidos, en donde ha multiplicado su facturación por seis, hasta los 21,9 millones de euros. En concreto, su filial Copasa Incorporate trabaja en la construcción de un viaducto de 500 metros de longitud y presupuestado en 31 millones de euros en la autopista interestal IH-10, a unos 50 kilómetros de Houston. Este contrato se suma al que también se ha adjudicado para la ampliación y modernización de 5,2 kilómetros de longitud de la autopista local FM 2354, también en el Condado de Chambers, por un importe cercano a los 6 millones de euros.
Su cartera de pedidos esquiva el golpe del Covid-19
Su presencia en Estados Unidos podría reforzarse si la compañía resulta la adjudicataria del AVE a California. Copasa, en consorcio con la también española Acciona y la nipona Hitachi, es una de las finalistas para construir un corredor ferroviario de unos 200 kilómetros de longitud en el valle central de California. La obra está valorada en cerca de 1.500 millones de euros e incluye la instalación de vía, catenaria, electrificación y sistemas de seguridad y señalización junto con un periodo de mantenimiento de 30 años.
Este posible contrato (se espera que el nombre del adjudicatario de la obra se conozca este mismo verano) daría un impulso a una cartera de pedidos que no se ha resentido pese al golpe del Covid-19. Esta ha descendido apenas de 1.874 a 1.816 millones de euros gracias al impulso de su segmento de edificación. Este escala desde los 25 millones de euros registrados en 2019 hasta los 146,7 millones a los que ascendía al cierre del año pasado. Complementa así los 855, millones de euros en servicios y los 814,5 millones de euros en ingeniería civil. La mayor parte de los contratos que Copasa tiene en cartera se llevarán a cabo en España. Con ellos está previsto que facture un total de 943 millones de euros, casi 70 millones más que con los 873,6 millones que tiene garantizados en pedidos del extranjero.