Clamor contra el cierre de Alcoa
Los trabajadores de Alcoa en A Coruña cortan el tráfico e impiden la salida de camiones de la fábrica para protestar contra el cierre de la planta
De la fábrica de Alcoa en A Coruña no salen camiones. Es una de las medidas de protesta que mantiene la plantilla, unos 370 trabajadores, contra el cierre anunciado por la multinacional norteamericana. Desde todas las administraciones, Gobierno, Xunta y Ayuntamiento, han mostrado su oposición a la radical medida propuesta por la compañía, que desembocará, presumiblemente, en una gran manifestación convocada por la plantilla para el próximo sábado.
A la espera de esa cita, la movilización movilización de los trabajadores comenzó desde el minuto uno. Este jueves se concentraron alrededor de las 17 horas frente a la factoría con una pancarta que proclamaba: “Peche non, enerxía solución”.
Desde el anuncio de Alcoa, la puerta de entrada de la planta se ha convertido en zona de acampada. Los trabajadores hacen turnos para impedir que salga material. Este miércoles quemaron neumáticos y cortaron parcialmente el tráfico en la avenida de Arteixo, que conduce a las instalaciones.
Llamamiento de los trabajadores a las administraciones
Los representantes de los trabajadores han hecho un llamamiento a la participación en la protesta de la ciudadanía y también de los políticos, porque entienden como imprescindible que se abra una mesa de negociación para revertir la decisión de la empresa y en la que creen que deben estar también presentes el Gobierno, la Xunta y el Principado de Asturias.
El comité de empresa se reunirá este viernes con el alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, el delegado del Gobierno, Javier Losada y con Alberto Núñez Feijóo, que volvió a mostrar su preocupación por el posible cierre de la planta.
El presidente de la Xunta presionó de nuevo al Gobierno de Pedro Sánchez, al indicar que siempre hubo problemas con Alcoa por el precio de la energía, pero que hasta ahora siempre se solucionaron. “Siempre tuvimos contactos con Alcoa y trabajamos para que mantuviese sus centros de trabajo en Galicia. De momento, con los Gobiernos anteriores, se solucionaron», aseguró.