Cinco de los seis pretendientes de Alcoa San Cibrao pasan la primera criba
El comité de empresa asegura, sin dar nombres al margen de Liberty, que ya ha acordado reuniones con tres candidatos a comprar la factoría de A Mariña
Trabajadores de Alcoa en Lugo durante las protestas realizadas en 2020. Foto: EFE/Eliseo Trigo
Cinco de los seis interesados en hacerse con la planta de aluminio de Alcoa en San Cibrao, en Cervo (Lugo), han pasado «la primera criba» que implica la adopción de una cláusula de confidencialidad, mientras que el sexto «todavía puede hacerlo estos días». Así lo aseguró el comité de empresa, al término de la nueva reunión multilateral sobre el proceso de venta de la factoría de aluminio primario.
Una reunión que se ha saldado con polémica a tenor de las declaraciones realizadas a su término por el secretario general de Industria, Raül Blanco, quien acusó a Alcoa de estar poniendo trabas a la venta. «Lo único que tiene que hacer Alcoa es vender, dejar paso a otro propietario que tenga licencia moral para operar en España, porque a Alcoa se le acaba ya su licencia moral»,afirmó el alto cargo de Industria.
Polémica por el papel de la SEPI
Sus declaraciones contrastan con las realizadas por Alcoa, que transmitió que ya ha iniciado negociaciones con los potenciales compradores, aunque resalta que la SEPI del Gobierno tiene que triangular la venta. “Alcoa mantiene su compromiso de avanzar en la venta a SEPI (la sociedad estatal de participaciones industriales), tras lo cual SEPI podría transferir la planta a un tercero», insiste.
En este escenario, y con seis potenciales compradores, cinco de ellos han recibido el term sheet de Alcoa, «que es el mismo para todos». Además, han recibido «informaciones genéricas y más específicas» sobre la planta, según apunta el comité, tras lo que le ha comunicado este jueves la empresa.
Reunión del comité con tres compradores
«Nosotros vamos a tener reuniones con tres de los seis compradores. Conoceremos los planes industriales y sobre todo los energéticos, que nos den viabilidad a largo plazo, para funcionar durante 20-25 años. Nos queda que los otros dos compradores se pongan en contacto con nosotros», ha explicado el presidente de los representantes de los trabajadores, José Antonio Zan, antes de hacer un llamamiento a «seguir unidos, luchando» por el futuro de la fábrica.
