Carta de la plantilla a Cándido Hermida: “Nunca te dejamos tirado”
Los trabajadores piden al propietario del histórico proveedor de Inditex que intervenga para corregir los “abusos” de la dirección en la oleada de ERTEs
“Algunos llevamos toda una vida en la empresa, otros no tanto, pero todos y todas tenemos la misma ilusión, las mismas ganas de trabajar, de aprender y de seguir creciendo que aquel pequeño grupo que comenzó a tu lado hace cerca de cuarenta años cuando decidiste abrir un modesto taller de ebanistería”. Es el fragmento de una carta de la plantilla de Cándido Hermida, un histórico proveedor de Inditex convertido en multinacional a base de armar las tiendas de la multinacional de Amancio Ortega.
La empresa aplicó un ERTE en todas las filiales que conforman el grupo por culpa del coronavirus, que frenó drásticamente la carga de trabajo. Ahora los trabajadores denuncian que la dirección está incurriendo en “abusos”, sin atender ni una sola demanda de la plantilla: “Pretenden que las ocho filiales negocien por separados”, “se niegan a complementar el pago de los ERTEs o a establecer rotaciones equilibrada”, dice la CIG.
Pero la misiva describe también un ambiente de represión y coacciones. “Nos coaccionaron y presionaron para que no asistiéramos a la asamblea de trabajadores, difamando y represaliando a los que se atrevieron a denunciar esta situación”, dice la carta, que tiene como objetivo pedir al fundador que intervenga para frenar los “abusos”.
“Desde el respeto que te profesamos, te pedimos que hagas lo que sea necesario para erradicar los abusos que siguen haciendo aquellos a los que confiaste el devenir de tu empresa. Si la situación no cambia, tendremos que ser nosotros, tus trabajadores y trabajadoras, los que hagamos los que sea necesario para defender los puestos de trabajo y el futuro de nuestras familias”, concluye el documento.
«Nunca te dejamos tirado. Jamás»
En el texto, la plantilla culpa a la actual dirección de Cándido Hermida de intentar modificar la jornada laboral para rebajar “todavía más” los salarios debido a “su propia incapacidad para organizar el trabajo”. “Aquellos que, pese a demostrar su ineficacia tienen sueldos tan altos en comparación con los nuestros que rozan la obscenidad, aquellos que al final de cada año recibían altísimas primas en suculentos sobres, eses nos dicen que vienen tiempos difíciles, que tenemos que ser los trabajadores y trabajadoras los que tenemos que sufrir las consecuencias económicas más graves de esta pandemia”, afirma.
Los trabajadores piden a Cándido Hermida que tenga en cuenta los esfuerzos realizados por todos los que trabajan y quieren seguir trabajando en la empresa. La descripción de la plantilla da una idea del ritmo frenético de trabajo para lograr cumplir los plazos de Inditex.
“Sabes muy bien los esfuerzos que hicimos todos nosotros desde que trabajamos para ti, poniendo nuestro propio coche para desplazarnos a los montajes por todo el Estado; adelantando dinero de nuestro bolsillo para pagar tasas en los aeropuertos por llevar exceso de material; para subsistir mientras estábamos lejos de nuestras familias o para comparar en una ferretería esta o aquella cosas que necesitábamos. Sabes que hemos trabajado día y noche sin descanso para poder entregar las tiendas en plazo, que siempre hicimos lo que fuera necesario para terminar los trabajos que se encomendaban. Siempre fuimos responsables, razonables, solidarios y solidarias. Siempre nos esforzamos cuanto pudimos. A veces en lugares muy remotos del mundo, lejos de nuestras casas y de nuestros seres queridos y en condiciones durísimas. Nunca te dejamos tirado. Jamás».