Cara y cruz para Megasa: gana el juicio clave por sus emisiones en Portugal mientras para en España
Un tribunal ha tumbado la ofensiva del colectivo vecinal que reclamaba 500 millones de euros a Megasa por las supuestas emisiones contaminantes de su fábrica al sur de Lisboa
Una de cal y una de arena para Megasa. La subida del precio de la electricidad ha obligado a reorganizar los turnos de producción y, posteriormente, a triplicar la duración de las vacaciones de Navidad para su plantilla en las plantas de Narón y Zaragoza.
Sin embargo, la suerte sí ha sonreído al grupo controlado por la familia Freire en el país vecino. En concreto, el Tribunal de Almada ha tumbado la ofensiva judicial de colectivos vecinales de la población de Paio Pires (situada en las afueras de Lisboa) contra la planta de Megasa, que opera bajo la enseña de Siderurgia Nacional.
Un litigio de 500 millones de euros
Según apunta el Tribunal de Almada a través de una sentencia, «no está probado» que la factoría de Megasa «esté incumpliendo los requisitos fijados en su licencia ambiental» o que la actividad de la empresa «cause daños a la salud de las poblaciones o al medio ambiente».
Es por ello que el tribunal considera que «no debe ser suspendida su actividad», como pretendía la Associação da Terra da Morte Lenta, que, además, reclamaba una indemnización de 500 millones de euros al grupo gallego. La asociación vecinal, que ha anunciado que recurrirá la sentencia, acusa a una de las dos factorías lusas de Megasa (la otra se ubica en Maia, en las inmediaciones de Porto) de emisiones contaminantes y de la generación de un fino polvo que se amontona, según denuncian, en calles y vehículos.
Vuelta al trabajo en Narón
De esta forma, Megasa gana el primer asalto del pulso judicial por su planta en Portugal mientras somete a sus factorías españolas a un parón de tres semanas como consecuencia de los altos precios de la luz. La dirección de la compañía decidió que los trabajadores del complejo de Narón se fuesen de vacaciones una semana antes de lo inicialmente previsto y que la vuelta al trabajo se retrasase del 2 al 10 de enero.
«En los últimos días no hemos tenido ninguna comunicación oficial por parte de la empresa, así que, en principio, la vuelta seguiría estando fijada para el día 10», apunta el presidente del comité de empresa, Carlos Bascoy.
Producción por las noches y los fines de semana
Este regreso a la actividad se hará con horarios adaptados para exprimir los tramos de la semana con la electricidad más barata. «En principio seguiríamos trabajando como venimos haciendo últimamente: en los turnos de noche y de fin de semana y en días festivos», recalca Bascoy.
La vuelta al trabajo se producirá, previsiblemente, en un momento en el que la tregua en el mercado eléctrico toca a su fin. Tras un último descenso que llevó el precio hasta los 122 euros el megavatio/hora el primer día del año, la luz encadena días de subidas hasta alcanzar los 215.86 euros el megavatio en el mercado mayorista este viernes.
Desde el comité de empresa apuntan al precio de la luz como principal foco de incertidumbre para Megasa, toda vez que «con el precio por encima de los 200 euros el megavatio [en el mercado mayorista] o incluso los 300 que hemos visto recientemente, la producción es inviable«.