Cándido Hermida reserva dinero para pagar a sus despedidos mientras los lleva a juicio
La empresa ferrolana, histórico proveedor de Inditex, provisiona 308.000 euros para hacer frente a los 23 despidos que ejecutó y que acabaron en los tribunales
Trabajadores de Cándido Hermida frente al Juzgado de Ferrol. / Cedida
Cándido Hermida es una de esas empresas gallegas que se convirtió en multinacional para atender a Inditex. Carpintero de referencia en el montaje de las tiendas de la multinacional de Amancio Ortega, la compañía ferrolana decidió despedir a 23 trabajadores, que durante semanas llevaron sus protestas frente al centro de trabajo y que acusaron a la dirección de represaliarlos por su papel en la negociación del ERTE provocado por la pandemia de coronavirus. Todos tenían una larga trayectoria en la empresa, alguno de casi 30 años.
La conciliación no llegó a buen puerto y trabajadores y empresa acabaron en los juzgados. Los juicios comenzaron el pasado septiembre, pero ya antes Cándido Hermida decidió provisionar para pagar las indemnizaciones en caso de que fuera necesario.
Las cuentas de la compañía especializada en ebanistería, carpintería metálica y habilitación de espacios comerciales revelan que dotó una provisión de 308.000 euros para hacer frente a las demandas.
“En la actualidad se mantienen procesos judiciales en curso y varias conciliaciones administrativas en las que se demanda la nulidad e improcedencia de dichos despidos, de cuya resolución, si resulta desfavorable para la empresa, podría derivarse un pasivo contingente estimado de 240.000 euros”, señala Cándido Hermida en la memoria de ejercicio.
Despedidos con más de 20 años de trayectoria en la empresa
Los sindicatos CIG y CCOO están impulsando movilizaciones frente a los juzgados en los días de juicio, que arrancaron el 20 de septiembre. La CIG acusó a la empresa de alegar causas económicas “falsas” para echar a los trabajadores y vinculó las salidas con el objetivo de “sacar de la empresa a todos aquellos que reclamaban sus derechos y que no estaban dispuestos a sufrir una precarización en sus condiciones laborales”.
Como avanzó este medio, el proveedor de Inditex perdió 4 millones el año de la pandemia, aunque prevé ya en este ejercicio volver a cifras precovid, con unos ingresos de 57 millones frente a los 34,1 millones que facturó en 2020.
