Azadea, eterno socio de Amancio Ortega en Oriente Próximo, emerge como salvavidas ruso de Inditex

El grupo de Líbano empezó a trabajar con Ortega en 1998 y ahora gestiona más de 200 tiendas de la multinacional; absorber el negocio ruso no le supondría problemas de reputación y podría evitar a Inditex dotar provisiones adicionales

García Maceiras en la junta de accionistas de Inditex / Inditex

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Inditex busca una solución para su negocio en Rusia, paralizado desde el pasado marzo, cuando la multinacional decidió cerrar sus más de 500 establecimientos en el territorio con motivo de la guerra en Ucrania y las sanciones al Gobierno de Vladimir Putin. La compañía de Amancio Ortega provisionó 216 millones por el impacto del conflicto con la idea inicial de reactivar su actividad cuando este cesara. El consejero delegado del grupo, Óscar García Maceiras, reconoció esta semana el cambio de planes en un acto en Zaragoza, donde señaló que Inditex «analiza diferentes opciones y mantiene conversaciones exploratorias respecto a potenciales alternativas» para sus tiendas y su plantilla en Rusia, alrededor de 9.000 trabajadores.

Estas exploraciones tendrían como objetivo taponar los costes en salarios y alquileres y garantizar una salida a la plantilla sin pagar el precio reputacional de reabrir las tiendas. Además, el grupo podría estar afrontando reclamaciones de los propietarios de los centros comerciales donde se ubican sus cadenas por el cese de la actividad. La solución natural para la compañía que preside Marta Ortega parece pasar por un traspaso a alguno de sus socios en Oriente Próximo, grupos que gestionan desde hace años sus marcas en países como Kuwait, Líbano, Arabia Saudí, Jordania o Emiratos Árabes. Son tres: Alhokair, Al Futtaim y Azadea.

Es el último el que ha tomado la delantera en las negociaciones con el gigante textil. La compañía con sede en Beirut incluso habría empezado a conformar un equipo liderado por el ex de Inditex José Luis Pavía para gestionar el negocio ruso, según avanzó Modaes.es. El ejecutivo cuenta con una larga trayectoria en el sector, en firmas como El Corte Inglés, C&A y, en su última etapa, Sociedad Textil Lonia, la empresa ourensana de la familia Domínguez que comercializa las marcas Carolina Herrera y Purificación García. En la multinacional de Amancio Ortega pasó por la directiva de Zara, Pull&Bear y Lefties.

Azadea duplicaría su tamaño

De completarse la operación, el reto sería mayúsculo para Azadea. No solo por las incertidumbres que genera la evolución de la economía rusa, sino también porque absorber el negocio de Inditex en el país supondría prácticamente duplicar su tamaño. La compañía libanesa gestiona más de 600 tiendas en 13 países y cuenta con más de 10.000 empleados, según la información de su página corporativa. Los establecimientos de Inditex en Rusia superan los 500 y la plantilla ronda los 9.000 trabajadores.

Azadea ya gestiona más de 200 franquicias de la compañía gallega en países como Argelia, Bahréin, Kuwait, Egipto, Líbano, Qatar o Emiratos Árabes. Comenzó a trabajar con Amancio Ortega en 1998, por lo que es un viejo conocido en Arteixo. En su portafolio de marcas están empresas como Decathlon, Gap, Mango, Reebok, Adidas o Calzedonia.

La distribuidora es propiedad de los hermanos Daher –Wassim, Said y Hassan–, cuya fortuna estimaba Bloomberg en 1.400 millones de dólares en 2015.

Los números de Inditex en Rusia

Rusia fue el año pasado el segundo mercado exterior más rentable de Inditex, con unos beneficios antes de impuestos de 240 millones, solo por detrás de los 253 millones que generaron las tiendas de Estados Unidos. También es el país extranjero en el que suma más puntos de venta tras el tijeretazo a la red de establecimientos de China. Cuando paralizó la actividad en el país, la multinacional explicó que Rusia representa un 8,5% del ebit del grupo.

Los analistas del Sabadell apuntaron en una nota esta semana que el mercado ruso aporta entre el 5% y el 6% de la facturación, lo que implicaría en torno a los 1.600 millones en ingresos. Añadían que esto representa unos márgenes superiores a la media del grupo.

Bankinter, por su parte, advirtió que los 216 millones provisionados por la situación de Rusia y Ucrania podrían no ser suficientes. «No descartamos nuevas provisiones en 2023, ya que Inditex podría estar prolongando los contratos de alquiler hasta mediados del próximo año», dijeron los analistas del banco. La venta del negocio podría evitarlo.

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