Altri controla desde Galicia 400 millones en activos con la sociedad que promueve la planta de fibra textil
La filial gallega Altri Participaciones es la única accionista de Celbi, la papelera de Figueira da Foz, y de Altri Sales, una comercializadora de celulosa con domicilio en Suiza; el holding pontevedrés ganó 160 millones en dos años
La pastera portuguesa Altri da un paso más hacia la fábrica de fibras textiles que pretende construir en Palas de Rei. La mayor iniciativa de Galicia a los fondos Next Generation por inversión, unos 800 millones de euros, será el cuarto proyecto industrial estratégico declarado por la Xunta, una figura que permite acelerar el proceso de tramitación. Pero además de agilizar permisos, la declaración también es una muestra de la apuesta del Gobierno autonómico por una iniciativa que la propia compañía todavía no ha confirmado, pues aplazó la decisión hasta el primer semestre de 2023, y que no tiene garantizado el acceso a los fondos europeos. Altri busca 200 millones, pero el Ejecutivo central no ha puesto en marcha un Perte en el que encajar sus ambiciones.
A la espera de despejar estas incógnitas, la planta de Palas de Rei (Lugo) está llamada a hilvanar una potente cadena de valor entre el sector forestal y el textil, y a cambiar el vínculo de la pastera lusa con Galicia. La relación tenía hasta ahora dos vertientes: una bien conocida en el monte gallego por la compra de madera para sus fábricas portuguesas de celulosa; y otra que pasaba desapercibida. La filial Altri Participaciones y Trading maneja desde Pontevedra más de 400 millones en activos del grupo. Es precisamente esta sociedad la que, según la Xunta, promueve la factoría de fibra textil, aunque la compañía había creado una empresa específica, Greenfiber, para el proyecto y en ella figura como consejero el primer ejecutivo de Greenalia, Manuel García Pardo, uno de los socios de la iniciativa.
Una fábrica en Portugal y una central de ventas en Suiza
Altri Participaciones tenía a cierre de 2021 un patrimonio neto de 397 millones y activos por valor de 437 millones a pesar de no contar con centro productivo alguno en Galicia o España. Por tanto, a diferencia de Greenfiber, una sociedad de nueva creación, ya está fuertemente capitalizada.
Su estructura es similar a la de una entidad de tenencia de valores extranjeros (ETVE), aunque no opera como tal, o a la de holdings como el que tiene la cementera brasileña Votorantim en Vigo. «Los administradores consideran que los dividendos recibidos no pueden ser considerados a efectos del cálculo de la cifra de negocios ya que no existe una evidente cercanía entre la actividad de tenencia de participación y la actividad propia de esas entidades y que dicha actividad no puede ser considerada ordinaria. En este sentido cabe destacar que se entiende que la Sociedad debe ser considerada una entidad holding industrial», explica la propia empresa en su memoria de ejercicio.
Sus dos grandes activos foráneos son una papelera en Portugal y una sociedad de comercialización en Suiza. La filial gallega, que a su vez pende de la matriz que cotiza en Lisboa, controla el 100% de Celulose Beira Industrial (Celbi), una planta de pasta de eucalipto ubicada en las proximidades de Figueira da Foz y con una capacidad de 700.000 toneladas anuales. Esta factoría ha sido uno de los tradicionales compradores de madera en el monte gallego. Altri Participaciones también tiene el 100% de Altri Sales, una sociedad suiza que se dedica a «prestar servicios de comercialización de celulosa», una central de ventas para el mercado europeo.
Dividendos y más de 160 millones de beneficio
De estas participadas, la filial gallega ha recibido 142 millones en dividendos entre 2020 y 2021, lo que ha engordado sus beneficios más allá de la actividad ordinaria de la compra y venta de madera. El año pasado, Altri Participaciones logró unas ganancias de 71,3 millones, mientras que en el ejercicio del Covid también logró un resultado positivo de 90,5 millones. En conjunto suponen más de 160 millones de beneficio en dos años.