Alcoa vuelve a recortar producción en Europa por el coste de la energía
La multinacional, que redujo a la mitad la producción de alúmina en Lugo y mantiene parado el aluminio de San Cibrao, reduce ahora la actividad en una factoría de Noruega "para mitigar los costes de la energía"
Trabajadores de Alcoa en la planta lucense de San Cibrao / EP
Pasa el tiempo y el temporal no amaina para Alcoa, que ha pasado las tijeras por sus dos plantas gallegas. La de alúmina opera a mitad de capacidad para paliar el elevado coste del gas que suministra Naturgy a través del gasoducto de A Mariña; la de aluminio está en suspenso desde comienzos de año en base al plan de la compañía para acordar un suministro eléctrico medianamente competitivo con varias empresas (ha firmado acuerdos con Greenalia y Capital Energy) y reactivar la producción en 2024.
Ahora, la multinacional con sede en Pittsburgh vuelve a aplicar recortes en territorio europeo. Esta vez en Noruega, en la fundición de Lista. El grupo que dirige Roy Harvey ha comunicado que reducirá una tercera parte de la capacidad de la planta, de 94.000 toneladas métricas anuales. Es decir, un recorte de 31.000 toneladas métricas, que se aplicará mediante la desactivación de uno de los tres potlines de los que dispone.
La fábrica «está expuesta a precios de energía que han aumentado a más de 600 dólares por megavatio hora. En el cuarto trimestre de 2022, se espera que la situación energética mejore debido a un acuerdo favorable con la empresa eléctrica Statkraft que proporcionará costos de energía más predecibles durante el resto del año y hasta 2023″, explica Alcoa en un comunicado.
La multinacional prevé completar la reducción en 14 días y mantener a los operarios tanto para el cierre ordenado de la línea de combustible como para su posterior reactivación.
ArcelorMittal no vuelve de vacaciones
El de Alcoa no es el único movimiento de este tipo que se está produciendo en la industria, sin que España se libre de los tijeretazos, como ya sucedió en la planta de alúmina. ArcelorMittal confirmó este martes que no reanudará de momento su actividad en la acería de Sestao tras las vacaciones de verano debido las condiciones adversas del mercado. Las instalaciones emplean a 278 personas.
Las «condiciones adversas de mercado» se componen de un descenso de la demanda de acero, en previsión de una crisis económica; importaciones de fuera de la Unión Europea y un alto coste del precio de la luz en una planta que funciona con energía eléctrica.
Acerinox, por su parte, ha anunciado un ERTE en la factoría de Los Barrios de Cádiz con el que intenta asegurar la viabilidad de las instalaciones durante el periodo de costes eléctricos elevados. Este expediente ya había sido acordado en marzo con los trabajadores con una duración de un año.
