Alcoa frena a Liberty: propone un ERTE de dos años para vender
La primera opción de Alcoa es aplicar el ERE y negociar la reincorporación de la plantilla con el comprador, pero también plantea un ERTE de dos años
El proceso de negociación del ERE de Alcoa sufrió un vuelco la pasada semana, tras conocerse que el gigante Liberty House está interesado en la planta de San Cibrao (en concreto tanto en la amenazada planta de aluminio como en la de alúmina, que el grupo americano descarta de plano vender). En cualquier caso, esta jornada se ha producido una nueva reunión de empresa y trabajadores dentro del periodo formal del consultas del expediente de regulación de empleo, que terminará mañana martes, 4 de agosto, en la que se han producido novedades. Alcoa ha presentado dos alternativas. En las dos sigue contemplando el proceso de venta pero, eso sí, aplazado en el tiempo y con un ERTE de por medio. En las dos insiste en la necesidad de parar ya las cubas de electrolisis y poner la planta en hibernación, algo que el comité de empresa rechaza de plano.
Opción prioritaria: aplicar el ERE
Según explican fuentes de la compañía a este medio, la primera propuesta, «opción prioritaria para Alcoa debido a las causas estructurales que afectan a la planta de aluminio», consiste en una inmediata hibernación de las cubas de electrolisis de San Cibrao. Esta opción implica la aplicación del despido colectivo una vez comience la hibernación de la factoría para, a continuación, «iniciar un proceso de venta de la planta de aluminio en el que, de prosperar, se exigiría al comprador la creación de una bolsa de empleo en el que tendrían prioridad de incorporación los trabajadores afectados por dicho despido colectivo».
Es decir, Alcoa propone aplicar el ERE en curso, despedir a los trabajadores, y negociar su reincorporación con el hipotético nuevo comprador de la planta.
Segunda opción: ERTE de dos años
La segunda propuesta de Alcoa pasa por aplicar un ERTE de suspensión de contratos de dos años, hasta el 31 de julio de 2022 en la planta de aluminio. Las cubas también se pararían «en un periodo estimado de hasta 120 días». Según explica la empresa, se iniciaria «un proceso de venta de la planta de aluminio de duración de hasta 9 meses de modo que, si se produce la venta y el comprador procede al re-arranque, Alcoa asumiría el coste de dicho re-arranque hasta 35 millones de dólares«.
«Si en dicho periodo no se produjera la venta, Alcoa mantendría el ERTE y se analizaría la evolución de los indicadores que afectan a la planta, para re-arrancar las cubas en caso de que se produjera un cambio en las circunstancias que permitiera la viabilidad de la planta y, en caso contrario, no se arrancarían e iniciaríamos la negociación de un despido colectivo», explica.
Estas son las dos propuestas que la multinacional ha puesto sobre la mesa de los trabajadores en un momento clave, ya que la negociación del ERE en marcha culmina este martes. Mientras tanto, Liberty House mantiene este lunes una ronda de contactos contrarreloj para explicar su plan de negocio para la factoría de San Cibrao.