Abanca negocia un ajuste de plantilla de 350 personas por la integración de Bankoa y Novo Banco
Arrancan las negociaciones entre entidad financiera y sindicatos. La parte social indica que la entidad habla de “solapamientos” en 15 provincias
Imagen de una oficina de Bankoa Abanca con la nueva imagen corporativa Abanca ha finalizado la integración de Bankoa con la realización de las dos últimas operaciones del proceso: la implantación de marca y el paso de la actividad a la plataforma tecnológica y operativa de Abanca. ESPAÑA EUROPA GALICIA ECONOMIA ABANCA
Abanca ha iniciado las negociaciones son los sindicatos para realizar un ajuste de plantilla que afectará a unos 350 trabajadores debido a la integración de Bankoa y Novo Banco.
Según fuentes sindicales, la entidad alega “causas organizativas y de producción”. La parte social también indica que Abanca habría hablado de “solapamientos en 15 provincias” a mayores de los servicios centrales, que en el caso de Bankoa se encuentran en San Sebastián. Aseguran las organizaciones sindicales que el proceso también tendrá repercusión en las cuatro provincias gallegas.
El representante de la CIG en la reunión, Alberto Carballo, expone el rechazo de su central al planteamiento de la empresa ya que, en la práctica, dice, supone «deshacerse» de un volumen de plantilla equivalente a casi «la totalidad» de la que aportan los bancos cuyo negocio «asume» la entidad gallega. Bankoa cuenta con algo menos de 260 trabajadores y Novo Banco con unos 157.
En cuanto a la edad, según indica, el banco estaría planteando salidas para mayores de 58 años aunque, según la central, “dan por hecho que si no se cubre el cupo «tendrá que tomar medidas traumáticas». Por último, la CIG señala que la dirección trasladó la intención de homologar condiciones y horarios.
Una docena de oficinas afectadas
La próxima reunión está convocada para el miércoles 24 y los sindicatos esperan entonces abordar la afectación de oficinas, que ronda a una docena, en entornos urbanos.
UGT y CCOO tienen mayoría y en el encuentro de este miércoles, que ha sido el primero dentro de un periodo de conversaciones informal que llegará al 31 de noviembre –luego habrá un plazo de otros 15 días para cerrar el acuerdo–, abogaron por dar voz, pero no voto, al sindicato LAB, que tiene el 100% de la representación sindical de los servicios centrales de Bankoa. Por su parte, Abanca «quiere trasladar la negociación a Madrid», según asegura la CIG.
