Abanca blinda el futuro económico del Deportivo (incluso en Segunda)
Escotet se muestra convencido de que el Dépor no descenderá de categoría, pero incluye un período de carencia de dos años en el acuerdo por si acaso ocurre
El Deportivo y Abanca han firmado un acuerdo de financiación por el que la entidad financiera otorga un préstamo de 45 millones a amortizar en 15 años que despeja a corto y medio plazo el futuro económico del club que preside Tino Fernández. El crédito permite al Dépor dejar prácticamente solventada su deuda con Hacienda, quedando pendiente de pago poco más de seis millones. Además de ampliar el plazo para la devolución de la deuda, el club herculino consigue en la operación cambiar al fisco por un socio financiero más próximo y, sobre todo, más flexible, como Abanca.
Ni el dirigente blanquiazul ni el recién nombrado presidente de Abanca, Juan Carlos Escotet, han querido desvelar alguna de las incógnitas que rodean a este anuncio, como el tipo de interés del préstamo o la cuantía del patrocinio del estadio de Riazor. Lo que sí ha avanzado Escotet es que, en caso de descenso a Segunda División, algo de lo que se muestra “seguro” de que “no va a ocrurrir”, el Deportivo tendrá dos años de carencia a la hora de hacer frente a los pagos.
El acuerdo da oxígeno al Deportivo a la hora de afrontar gastos, incrementando su competitividad a la hora de acudir al mercado de fichajes. Con el anterior modelo de financiación, apuntó Escotet, “la deuda, la estrechez y las limitaciones traerían como consecuencia en el futuro que el Deportivo se viese amenazado y cayese a Segunda». El descenso de categoría implica menos ingresos por derechos de retransmisión y por taquilla, lo que dificultaría la viabilidad del club.
Escotet considera que el Deportivo acabaría por descender a Segunda División con el anterior modelo de financiación
En los tres últimos años, el Dépor ha pagado a Hacienda un total de 82 millones de euros. “Ni los más optimistas gestores del dinero público se lo podrían haber imaginado”, indicaba orgulloso Tino Fernández. En esta línea, tras ingresar los fondos en Abanca, el club ha decidido destinar buena parte de ese dinero –unos 43,6 millones de euros– a cancelar la deuda privilegiada que mantenía con la Agencia Tributaria. Esta decisión libera al club en cuanto las garantías y obligaciones contraídas con el organismo.
El acuerdo, que contempla además una amplición del contrato de patrocinio y renombrar el estadio como Abanca-Riazor, permite al Deportivo elevar su tope salarial –aunque no se especificó la cuantía– y ampliar las posibilidades en el mercado de fichajes para formar un equipo más competitivo. Igualmente, aportará recursos para ejecutar el calendario de reformas en el estadio, que lo adecuarán a las necesidades actuales del fútbol de élite.
El club barajó otras opciones aparte de Abanca, pero, como reconoció el propio Tino Fernández, la entidad gallega le ofrecío un tipo de interés varios puntos inferior al del resto de referentes del sector, difícil de rechazar.