A Coruña, capital de la moda: inversión millonaria de Nextil en un centro de I+D
La antigua Dogi proyecta una inversión de 35 millones de euros para la implantación de una plataforma de investigación, cercano a sus fábricas de Braga, en Portugal
Galicia refueza su posición como territorio de referencia para la industria de la moda. Nextil, compañía especializada en la producción de tejido y prendas para el sector del lujo, el deporte y el baño, prepara su desembarco en la comunidad con un centro de investigación y desarrollo. En una comunicación remitida este lunes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) con motivo de la presentación de sus resultados trimestrales, la antigua Dogi indica que la compañía “está trabajando intensamente para la implementación de un centro de I+D en Galicia, próximo a nuestras fábricas de Braga, cuyo objetivo de disponer de una plataforma para la investigación, preproducciones y formación del equipo de nuestros clientes”.
Según este martes publica modaes, la empresa pretende invertir 35 millones en unas nuevas instalaciones que abarcarán, como mínimo, 12.000 metros cuadrados, y estarían ubicadas en A Coruña. Según indica el portal especializado en el sector textil, desde Nextil indican que la comunidad “está haciendo una apuesta por atraer centros de innovación y hemos recogido el guante”.
Ubicación estratégica
La ubicación en A Coruña permitiría a la compañía no solo estar cerca de las fábricas que posee en Braga, Portugal, sino aproximarse a uno de sus socios de referencia, Lavamar, que también tiene su sede en la ciudad herculina.
La textil cerró los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal con un resultado de explotación positivo de 48.000 euros, frente a las pérdidas de 8 millones del mismo periodo del año de la pandemia.
Resultados trimestrales
Con una facturación de 44,8 millones de euros, aún no ha logrado recuperar la posición prepandémica, ya que es un 80% de la cifra de negocio de 2019. En el tercer trimestre del año, no obstante, las ventas escalaron un 50%.
Comenta la compañía que “las ventas deberían haber sido mayores en la división de tejidos, puesto que la cartera de pedidos se ha incrementado un 180% de pedidos respecto a 2019. Sin embargo, los continuos cortes en la cadena de suministro de hilo, tanto en Europa como en América, ha obligado a cierres intermitentes en las fábricas. El alza continua de los precios de estas materias primas, del gas y de la electricidad, han penalizado el resultado”.