Psicología infantil y juvenil: las consultas se han incrementado un 30% tras la pandemia
Debido a la crisis sanitaria de la COVID-19, parte de la población tanto adultos como menores han experimentado problemas de salud mental como depresión, ansiedad o trastornos emocionales
La psicología, la ciencia que estudia y analiza la conducta humana y los procesos mentales ha ido ganando interés de forma progresiva. Cada vez son más personas las que se preocupan por su salud mental y que son conscientes del bienestar personal que produce acudir a un profesional. Por eso es tan necesario la psicología orientada a la población adulta como la psicología infantil.
El psicólogo destaca por orientar a los pacientes para que analicen sus comportamiento a través de una serie de recursos y técnicas que les permitan controlarlos. Pero hay que tener en cuenta que el psicólogo no dice a los pacientes lo que deben hacer, sino que trabaja facilitando y aportando soluciones que pueden dar resultado para los problemas que presentan.
En muchos casos, las terapias son de gran utilidad para fomentar el aprendizaje a través de la escucha y la conversación para potenciar sentimientos positivos hacia uno mismo.
La psicología infantil y juvenil
La pandemia ha provocado una serie alteraciones del estado psicológico no solo en la población adulta. Los niños y adolescentes también han sufrido las consecuencias de este virus a nivel mental.
Según el estudio de la Revista de Psicología Clínica con Niños y Adolescentes de aitana investigación, ha analizado las relaciones entre el estado psicológico de los menores y los miedos a enfermedades y contagios por el virus. El monográfico, en el que han participado 972 familias con hijos entre 3 y 18 años, indica que las mayores dificultades psicológicas se centran en problemas emocionales y de conducta.
Además, según avanzaba el confinamiento aumentaba la presencia de dificultades psicológicas que afectan de manera diferencial en la infancia y la adolescencia. Tanto en niños como adolescentes aparecían síntomas emocionales como hiperactividad, problemas de comportamiento o comportamientos relacionados con los miedos. En su conjunto, los adolescentes presentan más puntuación en miedos que los niños .
Máster en psicología infantil y juvenil
Para seguir investigando y especializándose sobre lo comentado anteriormente en psicología infantil y juvenil, una opción para ello es el Máster Universitario en Psicología en la Infancia y Adolescencia por la Universidad Internacional de Valencia (VIU). El programa se centra en la atención a la primera infancia, problemas de atención con hiperactividad, ansiedad social, tartamudez, timidez o problemas de conducta.
Otra opción a considerar sería el Máster en Psicología Infantil y Juvenil por el Instituto Superior Europeo de Barcelona (ISEB). Los alumnos de este programa online aprenderán sobre psicología infantil, psicología juvenil, hiperactividad, miedos infantiles, trastornos alimenticios, trastornos emocionales, abuso sexual infantil, técnicas de relajación o desarrollo de la inteligencia emocional.
El deterioro de la salud mental en la población ha provocado un incremento del 30% en las consultas psicológicas
Máster en investigación psicológica
La crisis sanitaria de la COVID-19 ha supuesto un punto de inflexión en la psicología. Mucha gente se toma ahora más en serio su salud mental. Según el estudio de El Ilustre Colegio Oficial de Psicología de Andalucía, en el primer año de la pandemia ha supuesto un deterioro de la salud mental en la población.
Las restricciones de movilidad, la imposición de horarios o el empeoramiento de la situación económica agravada por los ERE y ERTE supuso una limitación de la vida personal y laboral. Los datos terminaron por ser esclarecedores: las consultas en psicología se han incrementado en torno a un 30% en todo España.
Una opción para seguir avanzando en la investigación es el Máster universitario en investigación en psicología impartido por la UNIR. En su programa de metodología online se centra en la investigación basada en técnicas como la minería de datos, la integración de técnicas estadísticas y las herramientas para la comunicación psicológica tanto escrita como oral.