Los planes de pensiones cerrarán el mejor año en dos décadas
Los españoles que quieren completar la prestación pública aportan 260 millones al mes; los activos romperán en diciembre los 100.000 millones
Los fondos de pensiones romperán su récord este año. Lograrán el mayor número de aportaciones en dos décadas, concretamente desde 1994 no se había registrado una velocidad comparable. La media será ligeramente superior a los 500 millones mensuales.
La mitad de esa cifra la alimentan los pequeños ahorradores. El último dato cerrado es de octubre. En ese periodo, los españoles que quieren completar la pensión pública aportaron 259,6 millones. En diciembre, la actividad alcanza su cénit debido al cierre del ejercicio fiscal.
De este modo, los suscriptores no dejan de inflar un balance que está más cebado que nunca. Los activos agregados de los tres tipos de planes que operan en España –los individuales, de empleo y los asociados– romperán la barrera de los 100.000 millones, que generarán un patrimonio neto superior a los 7.500 millones ( 8%).
Pequeños ahorradores
Destaca la expansión de las referencias que contratan los particulares en las oficinas bancarias, desde donde se habrán suscrito fondos que apalancan en la actualidad 60.000 millones, con un crecimiento interanual del 11%.
Los planes de empresa superarán los 33.000 millones, según las cifras avanzadas que maneja el sector. Este segmento zanjará el ejercicio prácticamente plano, con una variación estimada del 0,5%.
Las decisiones de la ex ministra y vicepresidenta del Gobierno, Elena Salgado, están detrás del crecimiento de los planes individuales, que las entidades bancarias gestionan como un negocio a parte del tradicional.
El Ejecutivo socialista prohibió remunerar los productos de ahorro con extratipos. De este modo logró terminar con la guerra del pasivo, que ponía en riesgo la solvencia de los propios grupos de crédito.
Escenario propicio a los planes
La batalla entre entidades terminó en 2012. A la timidez comercial que reina desde entonces, que el Santander amenaza con romper ahora en Cataluña, se ha unido un escenario de tipos muy bajos propiciado por el Banco Central Europeo (BCE) para controlar la inflación.
Los ahorros de los clientes apenas crecen si se pondera lo poco que reciben de su banco y un escenario de IPC que, aunque evoluciona con debilidad, puede arañar algunas de esas escasas décimas de ganancias.
Esta lluvia fina ha regado el cultivo de los planes de pensiones. Según datos de la patronal sectorial Inverco, el rendimiento en el medio plazo está en el 7,23% (anual a tres años). Es la referencia que más crece. A cinco años alcanza una rentabilidad del 4,2%.
Cinco puntos más de ganancias
Los suscriptores obtienen, en un escenario económico aún complejo, hasta cinco puntos adicionales de ganancias y logran diferir el pago de impuestos.
A pesar de ello, la cifra de españoles que recurre a estos productos con la clara voluntad de garantizar su futura solvencia económica tampoco para de crecer. Diversas fuentes aseguran que se trata de una reacción que desenmascara una boyante desconfianza política y en el sistema público de pensiones.
Las cifras acompañan al largo plazo: la rentabilidad media anual y neta es la más elevada (4,97%) a la que se puede aspirar sin incurrir en otras inversiones de mayor complejidad. Si el ritmo se mantiene, las aportaciones de un titular se habrán triplicado para un plan que venza dentro de 24 años.
Ojo a las comisiones
Las asociaciones de consumidores advierten, sin embargo, de que los planes de pensiones son la nueva máquina de los bancos para generar comisiones. Como alternativa a la guerra del pasivo, los grupos financieros ofertan cuentas sin comisiones para captar clientes.
La caída de los ingresos por este concepto se compensa con los que proceden de productos ligados a la jubilación, a la inversión en bolsa o a las pólizas de seguros. El dato indica que aunque las cuentas sin comisiones están a la orden del día, la facturación del sector por esos conceptos ha crecido el 44,3% desde 2012, según un estudio de Adicae.
En el caso concreto de los planes de pensiones, la recomendación de los expertos es calcular los beneficios netos. Es decir, al margen de intereses cabría restar el lastre de las comisiones.