Los fondos buitre americanos reactivan el ladrillo tóxico
El interés por invertir en créditos e inmuebles de riesgo en España se dispara en pocos meses
¿Se avecina una nueva burbuja inmobiliaria? Los fondos buitre estadounidenses ya tienen en la mira un nuevo producto apetecible para sus intereses: el ladrillo tóxico español. Los inmuebles y créditos de alto riesgo en manos de entidades bancarias y del banco malo comienzan a levantar el apetito de los fondos de inversión de Estados Unidos.
“Cada semana nos contactan cuatro o cinco fondos de inversión. Están interesados en carteras de créditos e inmuebles de riesgo. Hay muchos que quieren invertir y vender en un plazo de 24 meses para obtener una rentabilidad rápida”, explica Nuno Espírito Santo, consejero delegado de Finsolutia, que gestiona créditos y activos inmobiliarios en España y Portugal.
Los inversores, con exceso de liquidez en Estados Unidos, están intentando diversificar su cartera de inversión y han comenzado con Reino Unido y, más recientemente, España. “Algunos llegan con expectativas demasiado altas. Creen que con las rebajas que ha habido en España pueden doblar la inversión en dos años. Y le decimos que eso está fuera de la realidad pero que se puede ganar dinero haciendo las cosas bien”, explica el consejero delegado.
Pisos sociales rematados
Dos de esos grandes fondos Goldman Sachs y Blackstone ya han adquirido dos grandes paquetes de pisos sociales del ayuntamiento y la comunidad de Madrid. Ahora, también pujarán por los 14.000 pisos sociales que pondrá a la venta Incasòl, la empresa que gestiona los pisos públicos en Catalunya.
Goldman Sachs compró a la Comunidad de Madrid 3.000 pisos del Ivima por 201 millones, es decir, 67.000 euros por vivienda. Por su parte, Blackstone adquirió 1.860 pisos por 128 millones al Ayuntamiento de Madrid, es decir, casi 69.000 euros cada uno.
Precios de subsuelo
Los fondos de inversión, que también han hecho compras masivas de viviendas problemáticas en Estados Unidos, confían en que el regreso de la confianza del mercado llegará de forma inminente.
Muchos de los fondos consideran que los precios de los peores activos no sólo ya han tocado fondo sino que se venden por debajo del precio del ladrillo, mientras que las viviendas estándar, no problemáticas, bajarán.
Los expertos del sector están convencidos de que los bancos comenzarán a reactivar el crédito inmobiliario en los próximos dos años y, por tanto, los precios volverán a subir. Pero ¿habrá una nueva burbuja? “Esperemos que no”, responde Gonzalo Jiménez, advisory manager de Finsolutia. “Esperemos”.