Los abusos de las operadoras móviles, ¿se acaban?
Los clientes ya no deben firmar contratos de permanencia
Desde que las OMVs (Operadoras Móviles Virtuales) empezaron a plantarle cara a las operadoras tradicionales, con buen servicio y tarifas más baratas, el mercado de las telecomunicaciones ha empezado a modificar su oferta a marchas forzadas, según informa a Economía Digital HelpMyCash.com.
El caso más flagrante ha sido el de Movistar que ha eliminado la permanencia en sus contratos, así como la liberación de sus terminales, cosa impensable hasta la fecha.
En este nuevo contexto de competitividad feroz, el gran beneficiado es el cliente que, gracias al gran abanico de ofertas a escoger, se puede permitir el lujo de exigir los siguientes mínimos:
1. No firmar un contrato de permanencia a no ser que se esté financiando un móvil junto con el contrato de la tarifa. Las pequeñas compañías virtuales como Pepephone, MásMóvil, Symio o HappyMóvil empezaron a ofrecer tarifas no vinculadas a un terminal y libres de permanencia. Y poco a poco, las grandes compañías empezaron a eliminar sus permanencias. El último caso, muy sonado, es el de Movistar, aunque otras compañías como Vodafone también han seguido la tendencia, de forma más paulatina.
2. El servicio 4G no debe suponer un coste adicional. Ninguna de las grandes operadoras que ya ofrecen el servicio cobra por el 4G, por lo que no tenemos ninguna necesidad de pagar por ello, y se espera que las más pequeñas tampoco cobren para lograr seguir siendo competitivas
3. No pagar a la compañía por liberar el móvil cuando se quiera cambiar de compañía una vez finalizada la permanencia. Pese a no haber una ley escrita como tal, desde la Comisión de Cooperación de Consumo y a través de una regulación de la CMT, se ratifica que las operadoras no pueden negarse a desbloquearlo. En caso de que las compañías nos obliguen a pagar, podemos denunciar a través de OCU o Facua.
Aunque las grandes operadoras parecían hacer oídos sordos a estas “recomendaciones”, ahora empiezan a replantearse sus políticas de cara a recuperar los clientes que han ido perdiendo a golpe de malas prácticas. Por eso, y gracias al 4G que por ahora queda únicamente en sus manos, el mercado de la telefonía podría cambiar aún mucho de aquí a final de año.