Colonial, favorita para comprar la sede de la Fundación Bertelsmann
La operación se cerraría por unos 40 millones de euros y ya encara su fase final
Grupo Bertelsmann se repliega en España. Si en otoño traspasó G J, la editora de revistas como Cosmopolitan, Muy Interesante y Marie Claire al fondo Axos MidCap, ahora venderá la sede de su fundación en el país. El conglomerado alemán ultima la venta del inmueble ubicado en el número 47 de la barcelonesa Travessera de Gràcia. El favorito para cerrar el traspaso es uno de los principales actores del sector inmobiliario en 2016: la cotizada Colonial.
La operación se cerraría por un precio que rondará los 40 millones de euros. La compañía oficializará la transacción en las próximas semanas «cuando se cierren los últimos flecos». De este modo, Colonial se habría impuesto, al menos, a una decena de candidatos entre los que se encontraban otras inmobiliarias y las grandes socimis del mercado español, abundan las mismas voces. Bertelsmann ha declinado confirmar o desmentir la información.
El edificio protagonizará uno de los pocos movimientos de este año en el centro de la ciudad. En 2016, el segmento de las oficinas movió 860 millones de euros en la capital catalana. Un 2,8% menos. El porcentaje cae todavía más en las calles más deseadas, donde la escasez de producto de calidad frena el apetito inversor existente.
Según la consultora JLL, la rentabilidad de estos inmuebles se sitúa alrededor del 4,25. Una cifra superior a otras ciudades como París pero que se despeña en los últimos tres años, pues en 2013 superaba holgadamente los márgenes del 7%.
El mismo intermediario añade que el suelo disponible está muy fragmentado. «Para compañías que busquen más de 3.000 metros cuadrados, las opciones se reducen drásticamente», señala. Disponer de un inmueble al completo a diez minutos a pie del paseo de Gracia y a cinco de la avenida Diagonal dispara el precio.
Inversores «largoplazistas»
Precisamente la calidad del bloque ha frenado a diversos fondos oportunistas, que centran su estrategia en la adquisición de activos de segunda línea para revalorizarlos y ponerlos de nuevo en venta. De hecho, los vehículos inversores cambiarán de trinchera en los próximos meses y abandonarán el perfil comprador para desprenderse de sus edificios con un retorno que rondará el 20%.
La asesoría Aguirre Newman apunta que el capital riesgo ha quedado reemplazado por inversores que tratan de sumar valor añadido a los inmuebles y con una visión más «largoplazista». La operación de la Fundación Bertelsmann sería un ejemplo.