Goirigolzarri venderá IAG e Indra para ganar liquidez en Bankia
NH también está en el punto de mira del nuevo presidente que necesita desinvertir para encarar más fácilmente el próximo calendario de vencimientos
José Ignacio Goirigolzarri volverá a la banca poniendo en venta buena parte de las participaciones industriales de Bankia. El futuro presidente de la entidad en crisis tiene en su punto de mira los títulos de IAG, la aerolínea resultante de la fusión entre Iberia y British Airways, la cadena hotelera NH y la tecnológica Indra.
Se trata de tres valores que, a pesar del deterioro al que están expuestos por los planes de rescate al banco madrileño, son atractivos para vendedor e hipotéticos compradores. Bankia tiene 3.000 millones invertidos en bolsa, así que la estrategia consiste en combinar la necesidad de hacer caja con la de suavizar minusvalías. El comportamiento de los títulos, por lo tanto, marcará el calendario.
Estas tres compañías permitirían ingresar unos 800 millones y, además, serían las que se colocarían con mayor celeridad ya que las posibles operaciones corporativas recibirán sin excesivas complicaciones los permisos de las autoridades anti monopolio de la Unión Europea.
Las joyas de la corona, Mapfre (20%), la principal aseguradora española, e Iberdrola (5%) “se venderán con más calma, si es necesario, ya que las minusvalías serían inasumibles”, según fuentes próximas al futuro presidente de Bankia. Ambas participaciones alcanzan prácticamente los 2.000 millones en bolsa.
Buscando oxígeno
El calendario aprieta y Bankia necesita oxigenar sus arcas. La acumulación de vencimientos de deuda también ha sido, junto al ladrillo, un frente de presión para la entidad en los últimos meses, aunque se ha mitigado con las subastas de liquidez a tres años realizadas por el Banco Central Europeo.
El grupo debe refinanciar o hacer frente sólo en 2012 a compromisos en los mercados mayoristas por 20.233 millones de euros —la cantidad total que debe CatalunyaCaixa a estos inversores–. El saldo cae en 2013 y 2014 hasta situarse entre 7.800 y 10.000 millones, por lo que se espera que el nuevo presidente de Bankia quiera concentrar las operaciones a partir del próximo año.
La cantidad que se logre desinvirtiendo facilitará la salida del pantanal una vez el grifo de las ayudas públicas esté totalmente cerrado, de modo que el bilbaíno buscará la oportunidad para maximizar estas ventas dentro de la estrategia global que diseña para reflotar la institución.
La oportunidad catalana
Bankia podría lograr 500 millones con el 12,7% de la aerolínea presidida por Antonio Vázquez, holding que ha remarcado desde su fundación la necesidad de dar entrada a otros socios del sector, aunque su posición siempre ha sido compradora. Goirigolzarri pretende aprovechar este tirón y la necesidad que tiene la aviación de concentrarse para subsistir.
El grupo internacional mantiene conversaciones para adquirir American Airlines y la portuguesa TAP. Sin embargo, la australiana Qantas, que ha puesto en marcha un plan para ahorrar costes y expandirse en Asia y cuyo beneficio cae trimestre a trimestre, podría entrar a formar parte del capital para potenciar las sinergias de su división internacional y frenar el caída de las ganancias.
El consejero delegado de IAG, Willie Walsh, ha manifestado que el grupo aeronáutico hispano-británico necesita crecer hacia el este. La salida de Bankia de la compañía de Vázquez también podría ser aprovechada por inversores e instituciones catalanas que aspiran a dotar con vuelos de largo radio al aeropuerto de Barcelona. Tras la entrada de Caja Madrid, Iberia se replegó a Barajas.
La participación turística del banco madrileño se concentra en la cadena hotelera que dirige Gabriele Burgio –impuesto hace un año por Caja Madrid–. Ahora NH es considerada no estratégica en las torres Kio aunque es una de las mayores participaciones, con el 15,7%. La porción podría revertir hasta 100 millones.
La participación clave para el Gobierno
El proceso de descapitalización se concentrará, por lo tanto, en los sectores que se cuentan entre los escasos con capacidad para generar retornos en el actual contexto económico. Javier Monzón, además de haber preservado y potenciado la presencia internacional de Indra, ha logrado para la tecnológica que preside varios contratos de relevancia en España, particularmente en las áreas de defensa, muy suculentos para competidores internacionales de mayor tamaño. Goirigolzarri no es ajeno a esta realidad.
Sin embargo, el Gobierno debería pronunciarse sobre cualquier operación que afecte a esta firma por su carácter estratégico. Por ello, los ojos de los principales bancos de inversión madrileños miran al Liberbank, presente con el 5% del capital. El valor de la porción de Bankia en Indra es de 250 millones de euros, equivalente al 20% del capital.