El Santander pide investigar al fondo que compra su ciudad financiera
Banco Santander exige que se investigue si fondo que realizó una puja mayor por su ciudad financiera cumple la normativa sobre blanqueo de capitales
El Banco Santander no se da por vencido por la pérdida de su ciudad financiera. La entidad exige al administrador concursal que gestiona la venta que haga comprobaciones sobre el fondo de los hermanos Simon y David Reuben, que ganó la puja. Amenaza con exigir una compensación de 750 millones.
El Santander pide que se verifique que el fondo, controlado desde paraísos fiscales, cumple la normativa sobre blanqueo de capitales, reputación y ética, según publica El País.
El banco ha enviado un escrito, con copia al Juzgado, en el que denuncia que, antes de señalar como vencedora esa oferta, no se realizaron las comprobaciones firmadas en 2008 por contrato con Marme, actual propietario de los inmuebles, en concurso de acreedores.
La administración concursal, según critica el banco en su escrito, no le ha hecho caso. Y pasa a las advertencias: si no se cumple a rajatabla el contrato de alquiler, dice que tiene derecho a dejar de pagar la renta, reclamar una compensación de 750 millones y ejercer derecho de retracto, es decir, recuperar su sede.
El recinto que quiere recuperar el banco está en manos de Marme, el fondo al que se lo vendió en 2008 tras pactar quedarse 40 años de alquiler. Marme está en concurso de acreedores desde 2014 y está liquidando la sociedad.
Derecho de tanteo
El Santander, que recurriría la decisión, tiene derecho de tanteo. Es decir, si iguala la mejor oferta será el comprador. La entidad considera que al aceptar la oferta del fondo sin comprobaciones se incurre en una ilegalidad. Advierte que, de persistir, podrían llegar a dejar de pagar el alquiler y exigir 750 millones.
El 12 de septiembre de 2008, cuando Marme compró la Ciudad Financiera, se firmó un contrato de arrendamiento porque el banco se quedaba de alquiler. En ese contrato, se incluyó la cláusula 17.4, de “compradores no idóneos”, que se calificó como esencial.
Marme se comprometía a “no transmitir la ciudad financiera a ninguna persona o entidad que no cumpla los requisitos de ética y cumplimiento de la legalidad nacional e internacional que se consideren habituales en el tráfico internacional», explica el documento.
También a llevar a cabo de forma diligente las actuaciones de verificación de cumplimiento de normativa sobre prevención de blanqueo de dinero y que se compruebe la identidad y reputación del comprador. En esta comprobación se incluyen también sus accionistas, consejo de administración y directores generales.
Además, deberá dar al Santander el resultado de las comprobaciones al menos un mes antes de formalizar la venta.
Mejor oferta por 51 millones de euros
El juzgado de lo Mercantil número 9 de Madrid proclamó esta semana como mejor oferta para la adquisición de la ciudad financiera del Santander la formulada por los hermanos Simon y David Reuben, que aseguró una cantidad fija de 283,73 millones de euros, 51 millones de euros más que el banco.
Los Reuben ofrecieron canalizar la operación a través de su brazo inversor registrado en España, Sorlinda Investment. Por su parte, el Santander ofreció 232,2 millones, quedando en segundo lugar. En la puja también participaron el fondo kuwaití AGC y la sociedad Lulia Spain.
En el caso de que el Santander se viera obligado a subir su puja, Sorlinda se quedaría sin poder comprar la Ciudad Financiera, pero sacaría cierto beneficio por una venta a un precio superior. Los Reuben compraron deuda de Marme y, si en la liquidación de la sociedad se consigue más dinero, podrían rentabilizar más su inversión.