El Santander gastará 900M para acomodar la plantilla a la nueva era
Banco Santander prevé reducir plantilla en unas 3.000 personas de oficinas, lo que le costará cerca de 900 millones de euros
Banco Santander hace cuentas de lo que le va a costar adaptar su plantilla en España a las necesidades actuales. Es decir, al hecho de contar con menos oficinas por la eliminación de duplicidades —oficinas muy cercanas entre sí tras la integración del Popular— y por los hábitos de los clientes, que se alejan cada día más de las sucursales físicas. La cifra se acerca a los 900 millones de euros, pero el ahorro a largo también es importante.
El ERE que la entidad presidida por Ana Botín presentará a los sindicatos después de Semana Santa le va a costar entre 850 y 900 millones de euros, según los datos a los que ha tenido acceso Economía Digital. Está previsto que el ERE afecte a 3.000 empleados de oficinas, y comportará también una reducción de las mismas. Cerrarán entre 1.000 y 1.200 sucursales del Santander y el Popular en España.
Según pudo saber este medio, el ERE que se iniciará después de la presentación del plan estratégico —realizada ya el 3 de abril— y de la junta de accionistas de 2019 se planteará en los mismos términos que el de 2018. De hecho, son dos patas de una misma mesa: la reestructuración tras la compra de Banco Popular por un euro. Entre 2017 y 2018 se negoció el de servicios centrales, que terminó con 1.100 empleados menos, y ahora es el turno del de oficinas.
El Santander iniciará el ERE para 3.000 empleados después de Semana Santa, con prejubilaciones y ofertas voluntarias
En los mismos términos significa con “ventajosas” condiciones para los empleados que quieran prejubilarse o simplemente dejar el banco, para lograr un pacto con los sindicatos e intentar evitar salidas forzosas. El anterior ERE incluyó prejubilaciones a partir de los 55 años y planes para los menores de esa edad, con compensaciones del 80% del sueldo y aportaciones al plan de pensiones a todos los mayores de 50 años con más de 15 años de antigüedad en el banco.
Ese plan costó 320 millones de euros al Santander, según consta en su memoria anual de 2018, por lo que un plan similar para 3.000 empleados puede costar entre 850 y 900 millones de euros. La cifra puede variar a la baja si, en las negociaciones, los sindicatos logran reducir el número de salidas, como ya hicieran en el anterior ERE.
La previsión es que los recortes se negocien durante la primavera para cerrar un acuerdo en junio, cuando se calcula que culminará por fin la migración tecnológica del sistema del Santander a las oficinas del Popular. Casi dos años después de la compra de dicho banco por parte del Santander, los clientes de ambas entidades siguen sin poder operar en las oficinas de la otra.
Plan estratégico del Santander: recortes por digitalización
Los recortes en España son una de las medidas puestas en marcha por el mayor banco español para ahorrar 1.200 millones de euros al año en gastos operativos. El Santander se ha marcado este objetivo en su plan estratégico para ser más eficiente y poder dedicar el máximo de esfuerzo posible a su digitalización. Además de España, el banco también tiene en marcha reestructuraciones en Reino Unido y Estados Unidos.
La transformación tecnológica es la piedra angular del futuro dibujado por Ana Botín y José Antonio Álvarez, y a ella destinarán 20.000 millones. El camino hacia la digitalización y la apuesta por Openbank, el banco móvil del Santander, tienen un significado: se necesitan menos oficinas físicas porque los clientes tienen muchos canales para relacionarse con el banco, y más rápidos y cómodos que visitar la sucursal.
La apuesta por la banca móvil es clara. La entidad prevé que Openbank llegue a diez mercados a medio plazo, con el objetivo de alcanzar los dos millones de clientes. Pero los 20.000 millones servirán para micho más, como un gran cambio en la infraestructura tecnológica, que se alojará en la nube.