El lobby de Castells pontifica en Madrid sobre la deuda española
EuropeG, impulsado por el ex consejero catalán de Economía, vaticina que las cuentas del Estado tardarán diez años más en recuperar la normalidad
Antoni Castells, ex consejero catalán de Economía en etapa socialista, ha aterrizado en Madrid con su lobby para presentar el quinto trabajo teórico que firma el colectivo de profesores. EuropeG, así se llama la organización, formada esencialmente por economistas catalanes, se centra esta vez en la evolución de la deuda española.
La principal conclusión es que las cuentas del Estado tardarán otros diez años en recuperar la normalidad, al menos entendida desde el punto de vista de la Unión Europea. Es decir, que se vuelvan a registrar tasas del 36% del PIB en lo relativo a la administraciones y del 60% respecto a la suma de los compromisos públicos y privados.
Tensiones financieras
EuropeG advierte de los mismos riesgos que varias agencias internacionales que, como Moody’s, opinan que florecerán próximas tensiones de financiación por necesidades aún no admitidas por el actual Ejecutivo. Sin entrar en política, los de Castells ven con cierta preocupación los vítores que la tímida recuperación empieza a generar.
“Es un riesgo que la recuperación, incipiente todavía, suponga el relajamiento de las reformas que aún se deben emprender”, ha dicho el antiguo responsable de las finanzas de la Generalitat. “La consolidación fiscal, por ejemplo, está lejos de haberse producido”. EuropeG defiende que la “devaluación interna” se ha zanjado totalmente.
Crecer y exportar
Es decir, los teóricos de Castells opinan, colegiadamente, que la reducción salarial y la destrucción de empleo habrían tocado fondo. La nueva fase económica debería garantizar el crecimiento para que España pueda equilibrar la deuda con más riqueza. Para estimular el mercado laboral, y por tanto, el consumo (que en el primer lustro de crisis ha caído en 200.000 millones) cabrían la reducción de las cotizaciones y la subida del IVA.
Nada nuevo bajo el Sol: a estas propuestas ya expuestas por otros grupos de opinión e incluso admitidas, aunque tímidamente, por el ministro Cristóbal Montoro (PP), EuropeG suma los avisos relativos al peligro de que los tipos de interés vuelvan a subir. También coincide en la necesidad de mantener el brío exportador de la economía española.
Exceso de crédito
España tiene además “un problema” de exceso de crédito. El catedrático de la Universidad Autónoma de Barcelona, Josep Oliver, opina que, “debido al peso relativo en el conjunto de la zona del euro”, hay 310.000 millones concedidos de más.
En conjunto el país debe 1,7 billones de euros. La cantidad está totalmente “escorada” hacia la construcción. Es necesaria, según la tesis expuesta este miércoles, una redistribución del crédito hacia otros sectores, a la par que se corrige “esa capacidad”.
Del dicho al hecho
Aunque Castells ve ahora con precaución la deuda, en su etapa política se caracterizó por justo lo contrario. Fue el resucitador de los bonos patrióticos, instrumento que inventó Jordi Pujol (CiU). Estas emisiones se utilizaron en 2011 para cubrir el gasto corriente del gobierno catalán: incluso captó más de mil millones con el Ejecutivo de José Montilla (PSC) en funciones, antes del traspaso de poderes a Artur Mas (CiU).
Al finalizar su gestión entregó un montante de 30.000 millones en vencimientos a su sucesor, Andreu Mas-Colell (CiU). Los tipos de interés que generaron sirvieron para justificar los actuales recortes presupuestarios y ahogaron a la Generalitat hasta pedir el rescate a Madrid a través del Fondo de Liquidez Autonómico.