El Gobierno prevé que la economía española se hundirá un 9,2% en 2020
El Gobierno ha enviado el Plan de Estabilidad a Bruselas que revela una caída de la actividad en 2020 y una recuperación del 6,8% en 2021
Las circunstancias han provocado un escenario macroeconómico verdaderamente pésimo por parte del Gobierno. Se prevé una caída del PIB del 9,2% en 2020, según desvela el Plan de Estabilidad que el Ejecutivo acaba de enviar a Bruselas, con peores pronósticos que el FMI. «La caída de la actividad económica está siendo muy intensa, mientras que la recuperación será más gradual y suave. El segundo trimestre concentrará la peor caída, pero en la segunda parte del año se iniciará la recuperación, que se acentuará en 2021», según ha indicado la vicepresidenta económica Nadia Calviño.
A pocos días que comience en España la desescalada, la ministra económica Calviño junto a la vicepresidenta María Jesús Montero han dado a conocer los detalles de los cambios que se han producido en las previsiones del Gobierno a causa del coronaivurs en el Palacio de la Moncloa.
Al batacazo económico le seguirá una recuperación del 6,8% en 2021 según el Gobierno, más optimista que el Fondo. La tasa de paro se prevé del 19% para este año, mientras que la reactivación prevista para 2021 reduciría el desempleo al 17,2%, cifras lejanas al máximo alcanzado durante la Gran Recesión, superior al 26%.
El impacto a corto plazo está siendo peor que la crisis financiera de 2008 en cuanto al PIB, pero no en cuanto a la pérdida de empleo, según ha destacado Calviño “y esto ha sido en gran parte gracias a los Expedientes de Regulación de Empleo (ERTE) y las medidas para evitar un mayor impacto de la contención”.
El Gobierno ha remitido esta media noche el Programa de Estabilidad 2020 del Reino de España y el Plan Nacional de Reformas a la Comisión Europea agotando el plazo. El primer trimestre del año la economía registró el mayor desplome de la serie histórica al caer el PIB un 5,2%, según los datos que publicó el INE este jueves.
«El escenario es complicado debido a la caída ingresos publicos y aumento del gasto público por los estabilizadores automáticos. Pero España se va a recueprar de este golpe y sin dejar a nadie atrás», ha indicado la ministra Montero. «Se trata de previsiones prudentes con la información disponible hasta el momento y acorde con las medidas de contención. Se verá una recuperación con forma de V asimétrica, como también prevén otros países», añade Calviño.
Las ministras han remarcado los antecedentes que preceden a la crisis, donde la economía venía creciendo por encima de la zona euro sobre el 2%, superando las tensiones comerciales y el Brexit. «Se trataba de un crecimiento sostenible con un superávit excepcional y creando empleo», añade Calviño.
Sin embargo, el coronavirus ha trastocado todos los pronósticos. Según los del Banco de España, la caída del PIB para este año será de, al menos, un 6,6%, que podría irse hasta el entorno del 9% en caso de que la actividad tarde en recuperarse una vez que se levante el confinamiento. El FMI, por otro lado, pronostica un desplome del PIB del 8%.
El impacto fiscal de la crisis
Los antecedentes fiscales se situaban en un 2,8% de déficit en 2019, cumpliendo con el pacto de estabilidad, según ha destacado Montero. Para este año, el déficit llegará a las dos cifras y será del 10,3% del PIB. O lo que es lo mismo, superará los 100.000 millones de euros. Por otro lado, después de la crisis, la deuda pública pasará del 95,5% al 115,5% en 2020, consecuencia de la desviación presupuestaria y también de la notable reducción de tamaño que sufrirá la economía —según las previsiones del Gobierno—, mientras que el gasto público superará en más de un 50% al de 2019.
Esto se debe, entre otros aspectos, a una caída de los ingresos de 25.700 millones respecto al año pasado. La previsión fiscal para 2021 queda pendiente por el «enorme período de incertidumbre en el que nos encontramos», según ha indicado Montero. «Nos quedan meses difíciles», ha admitido también Montero.