BBVA Research cuestiona las cuentas de los presupuestos de Sánchez
El servicio de estudios BBVA Research calcula que los ingresos de los presupuestos estarán entre los 1.200 y 2.000 millones de euros por debajo de lo anunciado
El Ejecutivo de Pedro Sánchez envió ayer, lunes, a Bruselas su proyecto de presupuestos 2019. Una de las características más destacadas por el Gobierno del texto es el aumento de los ingresos a partir de la reforma fiscal, en total, 5.678 millones de euros más. Sin embargo, existen dudas sobre la viabilidad de las cifras.
El último en pronunciarse ha sido BBVA Research. El servicio de estudios asegura que ve los ingresos «sobrestimados» en una o dos décimas del PIB, lo que supondría una diferencia de entre 1.200 y 2.000 millones de euros. También defiende que los gastos están «infravalorados» en una décima.
El servicio de estudios recomienda, para disminuir el desequilibrio en las cuentas públicas, la identificación y eliminación de gasto ineficiente, en donde hay un «enorme margen de maniobra». En caso de necesidad de incrementar la carga fiscal, considera que deben seguirse criterios de eficiencia que limiten el impacto negativo en la actividad.
De hecho, el texto explica que la presión fiscal —porcentaje de ingresos en relación al PIB que particulares y empresas aportan al Estado— aumentará del 34,93% de 2018 al 35,54% en 2019.
Evitar discontinuidades
El responsable de Análisis Macroeconómico de BBVA Research, Rafael Doménech, defiende que se trata de una evaluación «muy preliminar» del plan presupuestario. Sin embargo, recuerda que las empresas en España «pagan y contribuyen en el Impuesto de Sociedades en el entorno de lo que lo hacen otros países».
Doménech defiende que «hay que evitar la creación de umbrales y discontinuidades» en la fiscalidad entre las empresas de distinto tamaño porque «terminan generando incentivos o barreras que dificultan el crecimiento empresarial».
También rechaza el tipo efectivo del 18% para las entidades bancarias en el Impuesto de Sociedades que prevé aprobar el Gobierno, ya que «no hay ninguna razón para que la banca, ni las grandes compañías «tengan ninguna fiscalidad distinta al resto de empresas».
A su juicio, generar un sistema fiscal «complejo» da lugar a «discontinuidades» entre tamaño de empresas o sectores que «no se justifica», y acaba siendo un «lastre» para el crecimiento económico y la inversión.
Los empresarios discrepan con Sánchez
Según cálculos del Gobierno, el peso de los impuestos caerá principalmente sobre las empresas. En concreto, 3.826 millones de euros del total de la subida de impuestos se dirigen a las empresas, es decir, el 67,4%. La patronal, la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) considera «improbable» que se cumpla el incremento de la recaudación de 5.678 millones de euros de la que presume el Gobierno.
Argumenta que medidas como la «Tasa Google» que el ejecutivo cialcula que aportaría 1.200 millones de euros para las arcas, solo llegarían a la mitad. «Los 1.200 millones de euros estimados como recaudación por el impuesto a las empresas tecnológicas parecen excesivos, ya que las estimaciones de recaudación del gobierno anterior, sobre una propuesta de impuesto muy similar, ascendían a 600 millones de euros», explican.
También rebajan la fiscalidad del gasóleo de 670 millones de euros a 400, un 40,3% menos. En cuanto a los 1.500 millones de euros del Impuesto de Sociedades lo rebajan hasta un máximo de 1.300 millones, aunque recalcan que la mayoría llegaría por los dividendos de las filiales extranjeras y que «no es descartable» que estos disminuyan.
«Esta combinación de la política presupuestaria y fiscal no es la adecuada para consolidar el ciclo económico expansivo de la economía española», defienden.