El 45% de la hostelería sufrirá para pagar sus deudas con un rebrote
El Banco de España calcula que la pandemia podría dejar a un 30% del sector empresarial español con un riesgo alto o muy alto de impago
Los rebrotes que se multiplican a lo largo de España mantienen a las empresas y a la banca en vilo. El incremento del número de casos en España, está provocando que algunos municipios hayan optado por reconfinar a sus habitantes; medidas que, si se multiplican, podrían complicar la capacidad de sectores especialmente dañados por el coronavirus, como la hostelería, de devolver sus deudas. Así, el Banco de España anticipa que el riesgo de impago sería alto o muy alto para el 45% de las empresas de este segmento en caso de un rebrote, que provocara cierres fuertes de la actividad económica.
Este lunes, la institución que gobierna Pablo Hernández de Cos, publicó un estudio titulado «las necesidades de liquidez y la solvencia de las empresas no financieras españolas tras la perturbación del Covid-19», firmado por Roberto Blanco, Sergio Mayordomo, Álvaro Menéndez y Maristela Mulino, en el que repasaba la capacidad del tejido empresarial español para poder pagar sus deudas, de acuerdo con los diferentes escenarios económicos con los que trabaja el Banco de España.
En concreto, ha presentado tres posibilidades, alineadas con las previsiones del Banco Central Europeo (BCE), con dibujan tres posibles recesiones para este año, que irían desde una contracción del 9% al 15,1%. Si se cumpliera el tercer caso (como supuestos para desencadenar este golpe se tendría que producir un nuevo confinamiento severo), la peor parte se la llevaría el sector turístico, hostelero y de restauración, que serían los que más sufrirían para devolver sus deudas. Solo el sector del motor tendría un riesgo de impago similar.
En conjunto, el Banco de España calcula que el riesgo de impago en más del 30% del tejido empresarial español sería alto o muy alto si la economía se encamina hacia el peor de los tres escenarios. Incluso aunque solo se contrajera un 9% -una estimación que para la mayoría de analistas ya es excesivamente optimista-, el coronavirus empeorará notablemente la solvencia de las compañías españolas, porque subirá más de cinco puntos porcentuales.
Este salto explica muy bien las razones que han llevado a los bancos a reforzarse con 16.000 millones en provisiones, a la espera de lo que pueda dar de sí la morosidad.
Un entorno para el PIB cada vez más complicado
El Gobierno lleva días tratando de lanzar el mensaje de que lo peor para la economía ha pasado, pero las limitaciones que países como Francia, Alemania o Reino Unido están poniendo al turismo, y los rebrotes de coronavirus, cuestionan este optimismo, ya que la evolución del tercer trimestre es clave para moderar la recesión histórica que acumula que España y dar una visión más clara de hacia dónde va el déficit. Los analistas ya apuntan que las estimaciones del Gobierno están obsoletas y que superará el 10% previsto.
La fuerte caída del PIB en tasa intertrimestral durante el segundo trimestre, aunque no fue tan acusada como se llegó a temer, también alejaría la expectativa de que la recesión se vaya a quedar en un único dígito y si el sector hostelero sufre un golpe mayor, el paro y una nueva oleada de ERTE engordarían la cifra de prestaciones. El Banco de España calcula que las empresas de este segmento con una situación patrimonial más débil, generan alrededor del 40% del total del empleo dentro del sector.
El Gobierno ya se está moviendo para tratar de captar recursos con los que pagar una parte de la factura de los ERTE. Este lunes solicitó formalmente 20.000 millones a la Unión Europea del fondo especial que se ha creado para financiar estos programas y otras prestaciones, como las que se han diseñado para los autónomos.