Deutsche Bank y Commerzbank descartan su fusión
Deutschbank rechaza tener que ampliar su capital para cubrir los costes de fusión
Deutsche Bank y Commerzbank, los mayores bancos comerciales privados de Alemania, han interrumpido sus negociaciones de fusión porque no interesaban a sus inversores. Eso se debe a que los costes de reducción de personal hubieran sido muy elevados y no hubieran compensado las sinergias. Los dos bancos han señalado en un comunicado que, «tras un examen riguroso, se ha comprobado que esa fusión no interesaría a los accionistas de las dos empresas ni a otros grupos de interesados».
Las negociaciones entre las dos entidades bancarias llevan en pie desde el mes de marzo, cuando ambos anunciaron que habían comenzado conversaciones de sondeo para fusionarse y que no era seguro que fueran a terminar en una fusión.
Tanto como Deutsche Bank como Commerzbank, que cuenta con una inversión del 15% por parte del estado alemán, tienen una escasa rentabilidad y la capitalización bursátil de Commerzbank es muy baja, lo que le convierte en una compra atractiva para los bancos extranjeros.
La fusión no beneficiaría a Deutsche Bank
Ante las posibilidades de compra de Commerzbanck, el presidente de Deutsche Bank, Christian Sewing, afirmó que primero tenían que concentrarse en solucionar sus propios problemas. Por su parte, el ministro de Finanzas, el socialdemócrata Olaf Scholz, presionaba para que los dos bancos se fusionaran y crearan un banco alemán grande, con fuerte proyección internacional. Seis semanas después de iniciar esas negociaciones, Deutsche Bank y Commerzbank concluyen que «tenía sentido estudiar la opción de una consolidación alemana interna».
Pero también dejan claro que esa fusión no les hubiera ayudado a lograr unos beneficios más elevados, que las sinergias no eran tan elevadas como pensaban y que los costes de reestructuración que hubiera conllevado eran enormes y no hubieran compensado la reducción de costes que lograrían con la fusión.
«Tras un análisis profundo hemos llegado a la conclusión de que una fusión con Deutsche Bank no hubiera creado suficientes beneficios para compensar los riesgos de ejecución adicionales, costes de reestructuración y requerimientos de capital asociados con una integración de esa gran escala», señaló el presidente de Commerzbank, Martin Zielke.
Según varios analistas, para cubrir los costes señalados por Zielke, Deutsche Bank, que tiene unos 91.800 empleados a tiempo completo, debería acometer más ampliaciones de capital, y es posible que algunos de sus accionistas e inversores no estén dispuestos a hacerlo.