La inversión temática y la ISR, grandes oportunidades tras la pandemia
La revista INVERSIÓN celebró el primer foro online del ciclo ‘El ahorro después del coronavirus’ analizando los activos inmunes al virus y nuevas tendencias
La pandemia del coronavirus marcará un antes y un después en la forma de vida de la población mundial, y este cambio se extenderá a la forma de ahorrar y de invertir. En este escenario las inversiones temáticas irrumpen con fuerza junto a la inversión socialmente responsable (ISR) y el crédito corporativo de alta calidad.
Estas han sido algunas de las conclusiones emanadas del primer foro del ciclo ‘El ahorro después del coronavirus’, que se celebra online, entre los días 28 de abril y 7 de mayo, organizado por la revista INVERSIÓN y patrocinado por Schroders y Banco Mediolanum en colaboración con EFPA.
En el primer foro celebrado bajo el título ‘Un mundo nuevo, unas nuevas inversiones’ participaron Inés del Molino, directora de cuentas de Schroders, y Xavier Blanquet, director de soluciones de ahorro de Banco Sabadell. En el evento, moderado por Alejandro Ramírez, director de la revista INVERSIÓN, los expertos analizaron la actual situación de los mercados, el futuro de la gestión de activos, las mejores oportunidades de inversión para después de la pandemia y la importancia de contar con un buen asesoramiento financiero ante la nueva realidad de los mercados.
A juicio de Inés del Molino, los inversores deberán afrontar esta transformación con “paciencia, prudencia y con el horizonte puesto en el largo plazo, porque esta es la forma de conseguir los mejores resultados”. En su opinión, las últimas semanas los mercados han estado marcados por una gran volatilidad y por enormes tensiones, lo que ha suscitado el miedo de los inversores, “en este contexto deben actuar con máxima prudencia para evitar cometer errores”, señala.
Y toda prudencia es poca ante los cambios que se avecinan tras la pandemia del coronavirus. A juicio de Xavier Blanquet los principales son tres: el final del modelo económico actual basado en la globalización, que dará paso a otro modelo en que impere el proteccionismo y la producción local; el cambio producido por la transformación digital que afectará a nuestra forma de comprar, de trabajar, de estudiar y de relacionarnos, y el cambio que generará el gran endeudamiento de los estados y que afectará a los mercados y a la fiscalidad. Ante esta nueva realidad “los ciudadanos tienen que estar preparados”, advierte Blanquet.
Nuevas oportunidades de inversión
Estos cambios generarán nuevas oportunidades de inversión entre las que Inés del Molino destaca el crédito corporativo de alta calidad y la inversión temática, sobre todo las relacionadas con la salud y la tecnología, la transición energética hacia energías limpias, la transformación de las ciudades y el cambio climático. En su opinión, “existen suficientes tendencias en las que invertir a largo plazo que deben conocer los inversores para capturarlas ahora y aprovecharlas”.
También considera que la inversión socialmente responsable saldrá fortalecida tras la pandemia: “La industria no dejará hueco a activos que no sean socialmente responsables. En Schroders somos unos creyentes de que la ISR se está convirtiendo en el ADN de los productos financieros para la inversión”, asegura Del Molino.
Pero no son sus únicas apuestas. Cree que los valores refugio suponen ahora una buena oportunidad: “Nosotros estamos comprando para nuestras carteras globales oro, yenes y dólares, ya que son activos que se comportan como refugio ante los actuales movimientos del mercado”. También cree que la renta variable de los países emergentes, sobre todo de Asia, puede dar alegría a los que opten por ella, sobre todo si la inversión es a largo plazo, entre 3 y 5 años.
Por su parte, Xavier Blanquet, ante una de las muchas preguntas que hicieron los partícipes en el foro a los ponentes, señaló que también es un buen momento para invertir en China, eso sí, siempre que la inversión sea a corto plazo. Las petroleras que estén por debajo de su precio objetivo son otra buena opción de entrada para él, siempre que la inversión sea a medio plazo. Mientras que a largo plazo la inversión inmobiliaria “puede hacerlo bien”.
La necesidad de un buen asesor
Decida lo que decida, el inversor debería contar con un asesor financiero que le ayude a planificar su inversión, señalan los expertos, con el que deberían hablar de su perfil de riesgo, de los objetivos que quieren conseguir con la inversión y de su horizonte temporal. “Este cuanto más largo mejor, ya que así tiene más posibilidades de recuperar la inversión”, asegura Del Molino.
Para dar solidez y rentabilidad a sus carteras, Xavier Blanquet señala que el inversor debe cumplir tres reglas esenciales: diversificar sus activos, cultivar la paciencia respecto al horizonte temporal de la inversión y constancia al invertir. “Lo que significa evitar hacer movimientos de salida que le lleven a asumir pérdidas, ya que corre el riesgo de salir mal y de perderse los rebotes que se puedan producir”.
Inés del Molino es de la misma opinión. Considera que en un mercado tan errático como el actual deshacer carteras y materializar las perdidas tiene un problema añadido: el de no saber cuándo volver a entrar. Además, “saliéndote del mercado no podrás recuperar el dinero perdido”.
La importancia de una buena planificación
Ante la nueva etapa a la que nos ha enfrentado el coronavirus una buena planificación del ahorro es esencial, en opinión de Blanquet. “Esta ayudará al inversor a enfrentarse a periodos de volatilidad como el actual y es, sin duda, la primera gran lección que hemos aprendido con esta crisis. Todo puede pasar, por ello tener un ahorro para afrontar imprevistos es esencial y realizar inversiones periódicas es una buena manera de conseguirlo”. A su juicio, el ahorro genera disciplina y evitará que en momentos como los actuales deshagamos posiciones de forma errónea.