Bankia pasa el ecuador de su plan estratégico con los dedos cruzados
Los resultados de Banco Sabadell y Caixabank enrarecen el clima en el que presentará sus cuentas el banco presidido por José Ignacio Goirigolzarri
270 millones de un plumazo este viernes, arrastrada por los resultados de Caixabank y Banco Sabadell y 2.200 millones desde enero. Esta es la pérdida de valor en bolsa con la que Bankia llega este lunes a la presentación de sus resultados del primer semestre de 2019; especialmente dañada por la política europea de tipos de interés y presionada por la expectativa de que tendrá que revisar los objetivos de su plan estratégico.
Para el banco que preside José Ignacio Goirigolzarri el primer semestre de 2019 coincide también con el paso de ecuador de su plan estratégico para 2018-2020. De acuerdo con las estimaciones de la revista Inversión, el mercado estaría esperando que anunciara un beneficio neto de 389 millones en el semestre.
Bankia es una de las entidades españolas más expuestas a la evolución de los tipos de interés, por lo que la revisión de los objetivos de márgenes que presentaron sus competidores el último viernes, ha provocado que los inversores anticipen un movimiento similar; o incluso esperan un actualización de la guía a peor.
Por el momento, el español se ha resistido a retocar sus previsiones de beneficio para 2020 – que son alcanzar un beneficio de 1.300 millones-, pero los analistas ya calculan un resultado más bajo. Solo para 2019, las estimaciones de beneficios del conjunto de la banca española se han reducido en cerca de 1.500 millones, ante la expectativa de que en vez de regresar a un entorno de subida de tipos, como se anticipaba en el primera mitad del año pasado, el Banco Central Europeo (BCE) volverá a reducirlos.
Bankia defiende su dividendo
José Ignacio Goirigolzarri, que ya lleva algunas presentaciones de resultados sin poner la mano en el fuego por la guía de beneficio a 2020, ha convertido, sin embargo, el dividendo en su punta de lanza. La entidad se comprometió a repartir 2.500 millones en dividendos en su nueva hoja de ruta; la mayor parte procedente de la devolución del exceso de capital por encima del 12% en la ratio CET 1 Fully Loaded, que ya contaría con una importante reserva.
Por el momento, Bankia no ha especificado cuándo podría abonarse. En principio, el plan del banco era valorarlo en el primer consejo de cada ejercicio. En 2019, la entidad prefirió esperar a conocer los requerimientos de MREL y a la aprobación del banking package por parte de la Unión Europea antes de tomar cualquier decisión; algo que ahora ya conoce; por lo que establecer una fecha podría estar más cerca.
El pago de dividendos es una herramienta para devolver capital al Estado; es decir, las ayudas recibidas para su reestructuración. Desde 2013, el Estado ha recibido 960 millones en concepto de retribución por su participación en Bankia. Una cifra menor a la que le quedaría por cobrar si la entidad cumple los objetivos recogidos en su plan estratégico.