Banco Popular pone fecha límite a su venta y se deshace de Merlin
El 10 de junio será una fecha histórica para el banco: Saracho decidirá si acepta las ofertas de compra o intenta una ampliación con escasas posibilidades
El 10 de junio. Esa será la fecha en que Banco Popular decidirá si consuma la venta o si tendrá el valor suficiente para ordenar una una ampliación de capital con escasas posibilidades de éxito. El banco de Emilio Saracho necesita entre 4.000 y 5.000 millones de euros antes de fin de año, monto que sólo podría ser accesible en los mercados para unos pocos bancos. BBVA o el Santander son las alternativas más sólidas para lograr los recursos a tiempo.
Para poder aliviar su crítica situación, el Popular decidió sacar a la venta su participación en la socimi Merlin Properties: se trata del 2,86% del capital social, unos 13,41 millones de acciones que tienen un valor de 145,7 millones de euros. Credit Suisse Securities será el agente colocador de la operación.
La participación del Popular en esta sociedad inversora proviene de cuando el banco era accionista de Metrovacesa, que en octubre se fusionó con Merlin. La capitalización bursátil de esta empresa es de 5.100 millones de euros.
Popular suma esta desinversión a las realizadas en las últimas fechas, como la de su filial de servicios financieros Abanca por 39 millones de euros. Y tantea la venta del 49% de la banca online Wizink, cuyo valor total ronda los 2.500 millones de euros.
El Popular arrastra a los valores de la banca en la bolsa
La posible venta del Popular ha sacudido la jornada del IBEX 35 el miércoles, que ha tenido la peor sesión del año. El selectivo español ha perdido los 10.800 puntos después de caer un 1,79%, lastrado por las fuertes pérdidas de la banca.
Los títulos de Bankia, han sido los que más se han dejado, un 4,17%, hasta situar el valor en los 1,06 euros. La entidad que preside Emilio Saracho no se quedó atrás. Sus acciones valían al cierre de la sesión un 3,73% menos, concretamente 0,67 euros. La tercera caída más fuerte ha sido Caixabank, con un descenso del 3,70%, seguido por el Sabadell (-3,13%), el Santander (-2,84%) y BBVA (-2,06%).
Además de los movimientos corporativos en el sector bancario, la caída del dólar ante el nerviosismo por las polémicas que rodean al presidente estadounidense Donald Trump también ha pasado factura al IBEX 35, que concluye la sesión en los 10.786,10 puntos, con lo que las ganancias de mayo descienden al 0,66%, y las del año se reducen al 15,33%.