Alarma en el FMI por la concentración de poder en las megaempresas
El FMI constata que el 10% de las empresas más grandes son el 50% más rentables. "El ganador de estas dinámicas se lo lleva todo", advierte el organismo
Las claras protagonistas de los últimos años crecimiento económico han sido las megaempresas, que han ido ganando peso en términos absolutos y relativos hasta disparar las alarmas del Fondo Monetario Internacional (FMI). Entre 2008 y 2015 los márgenes de los grandes conglomerados crecieron un 8%, casi el doble que la actividad mundial.
El FMI alerta sobre el creciente poder de mercado de las concentraciones de compañías en la economía. El riesgo es que «el ganador de estas dinámicas se lo lleva todo», principalmente a través de productos innovadores y prácticas comerciales que les benefician. Es por ello por lo que impulsan el levantamiento de barreras de entrada a sus mercados.
Estas empresas tienen capacidad de aumentar y mantener el precio de sus productos o servicios por encima del nivel que existiría en caso de que el mercado fuera totalmente competitivo. Según el FMI, el 10% de las empresas más grandes son, en promedio, alrededor del 50% más rentables y un 30% más productivas.
Las concentraciones empresariales crecen especialmente en los países avanzados, principalmente en EEUU
Las concentraciones empresariales crecen especialmente en los países avanzados y ocurre con mayor frecuencia en EEUU frente a Europa. El responsable es uno muy claro: la productividad.
Según el informe de primavera del FMI la productividad de las grandes empresas es mayor que en las pequeñas debido a que invierten en intangibles, como patentes y software. Además, la globalización permite que se beneficien de las economías de escala y efectos en red invirtiendo en innovación y tecnología.
Por último, la deslocalización de una parte de la producción hacia países con menor coste de mano de obra también impulsa el crecimiento de estas agrupaciones mientras que aumentan las desigualdades salariales entre empresas.
Para preservar la competencia, el FMI pide que se estreche la vigilancia a través de reformas que impulsen la eliminación de las barreras nacionales de entrada en las industrias no manufactureras, la liberalización del comercio, la Inversión directa, y cambios en la carga fiscal que soportan las empresas.
Guerra de impuestos
El estudio del FMI se ha realizado sobre 27 países (16 de economías avanzadas y el resto de emergentes) desde el año 2000, y advierte de que todos los sectores están afectados por este proceso.
El segmento más representativo por ingresos es el relacionado con las tecnologías de la información y de la comunicación, el sector financiero y las actividades de seguros y de prestación de servicios públicos.
De hecho, el organismo pidió recientemente una revisión del sistema internacional que «favorece» la evasión de las empresas multinacionales de sus deberes fiscales, especialmente en el sector digital. La entidad financera critica que durante los treinta últimos años, estas empresas han reducido sus impuestos progresivamente en el ámbito europeo.
«La facilidad con las que las empresas multinacionales para ser capaces de evitar los impuestos y el largo declive en las tasas impositivos para las empresas de tres décadas, socava la confianza en el sistema fiscal en general», explicó Christine Lagarde, directora del organismo.