Volkswagen prolonga el ERTE en su planta de Navarra hasta junio por la crisis de microchips
La dirección de la compañía alemana llega a un acuerdo con los sindicatos para evitar que la caída de producción se traduzca en despidos
Imagen de la planta de producción de Volkswagen en Navarra. Foto: Volkswagen
Volkswagen Navarra ha decidido mantener el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que puso en marcha en el arranque de la pandemia al menos hasta el mes de junio. La dirección de la compañía ha llegado a un acuerdo con los principales sindicatos de la fábrica de Pamplona (CC.OO. y UGT) para extender durante medio año más este paraguas excepcional.
La empresa de automoción ha explicado en un comunicado que el principal problema que le ha llevado a prolongar esta medida es la crisis internacional de suministros que ha puesto en jaque al sector desde hace un año, debido a la fuerte dependencia que tienen las grandes marcas de estos componentes electrónicos.
«Se impone como principal causa de esta situación económica la alteración del ritmo productivo debido a la falta de microchips, situación que afecta a todas las empresas productoras de coches del país y, de distintas maneras, al sector de automoción principalmente europeo», ha explicado la compañía.
Volkswagen pedirá por lo tanto un ERTE por causas productivas, una de las condiciones que estableció el Ministerio de Trabajo para tratar de evitar la quiebra de las empresas durante la fase más dura de la crisis económica de la Covid-19. Comenzará a aplicarse ya el 3 de febrero y no finalizará hasta el 30 de junio.
Volkswagen cierra la puerta a despidos tras el ERTE
La empresa se garantiza así que pueda mantener un ritmo productivo más bajo por la ausencia de semiconductores en el mercado, sin tener que aplicar despidos permanentes sobre la plantilla. No se producirá en días ni turnos completos para acompasar la fabricación al contexto global.
«Las actuales circunstancias no permiten presagiar de manera inmediata la solución de los problemas de suministro generados por la crisis pandémica para paliar los consecuentes días de cierre», han remarcado.
Volkswagen ha mantenido su compromiso por no destruir empleo siempre y cuando pueda contar con este tipo de mecanismos para adaptarse al ritmo de producción, mientras que ha fiado las decisiones de los próximos meses a la negociación sindical. Si la situación no despega en un semestre, la empresa contempla volver a pedir otra prórroga adicional.
La planta ubicada en el polígono industrial de Landaben (Pamplona) lleva trabajando de manera ininterrumpida desde el año 1984. Primero inició la fabricación en serie del Polo, pero en los últimos tres años ha incorporado otros nuevos modelos a las líneas como el T-Cross o el Taigo. En 2021, salieron de allí más de 221.000 vehículos montados. La mayor parte en dirección a Alemania, Italia y Francia.
