Biden adelanta a Sánchez: dará 10.000 millones de dólares a VW para una fábrica de baterías
La factoría de Sagunto recibirá una parte de los 372 millones asignados al proyecto de Seat y su matriz procedentes del Perte VEC, a la espera de la segunda convocatoria
Un operario saca brillo a un vehículo Volkswagen Touareg. EFE
Joe Biden se adelanta a Pedro Sánchez. Mientras las empresas del sector automóvil esperan la segunda convocatoria del Perte del coche eléctrico para valorar sus inversiones en España, el grupo Volkswagen se lanza a las ayudas del dirigente norteamericano y acelera sus planes para alzar una fábrica de baterías en Estados Unidos.
Según ha adelantado este miércoles Financial Times, la multinacional alemana calcula que podría percibir 10.000 millones de dólares en ayudas para su nueva fábrica en el país procedentes de la Ley de Reducción de la Inflación (IRA) del presidente Biden. Se trata de un paquete de más de 369.000 millones de dólares en subsidios e incentivos fiscales para acelerar la transformación energética.
Mientras, los planes para construir la gigafactoría del grupo en Sagunto siguen en marcha, tras el rifirrafe entre la mayor automovilística de Europa y el Gobierno el pasado otoño, que acabó con una asignación de 372 millones de euros para su proyecto en el primer Perte. Una parte de esta cifra irá a la fábrica valenciana, que requerirá de una inversión total de 3.000 millones. A priori, los planes de Volkswagen de alzar más fábricas de baterías no deberían de intervenir con el centro español.
Sin embargo, los planes de la compañía dirigida por Oliver Blume para Norteamérica se han acelerado hasta el punto que dejan en el aire su proyecto de construir otra fábrica en el este de Europa. De hecho, el propio jefe de Tecnología de Volkswagen, Thomas Schmall confirmó en su cuenta de LinkedIn este avance de su hoja de ruta en EE. UU, mientras escribió que Europa corre el riesgo de perder «billones en inversiones que se decidirán en los próximos meses o años». Además, pidió un programa público de ayudas y la rebaja del precio de la energía, más alto que el del país americano.
Según el medio británico, el fabricante comunicó a la Unión Europea que espera recibir préstamos por esta cantidad procedentes del gobierno de los EE. UU para ver su reacción al respecto. La IRA levanta escalofríos a la administración comunitaria por el miedo de que deslocalice inversiones de empresas europeas.
La decisión no está tomada
Por su parte, el grupo automovilismo insiste en que no se han tomado decisiones sobre la localización de sus fábricas ni en América ni en Europa, pero mantiene su compromiso de alzar estas factorías para asegurarse el suministro de componentes. Sin embargo, añaden: «Pero por esto necesitamos unas buenas condiciones. Por esto estamos esperando a ver que nos traerá el Green Deal (Pacto Verde) de la UE». El citado pacto es una iniciativa política de la Comisión equivalente a la IRA de Biden.
