El ‘sorpasso’ alemán de Vodafone obliga a Telefónica a vigilar el acuerdo con Digi en España
El negocio mayorista del operador azul es uno de los grandes dinamizadores para la caja de la compañía, por eso es importante tener bien atados sus grandes acuerdos
Telefónica ha vivido un auténtico tsunami este miércoles en Alemania. La compañía presidida por José María Álvarez-Pallete se ha visto arrollada por el acuerdo de Vodafone con 1&1, que le ha pillado por sorpresa. Una situación que provoca que el operador azul tenga que vigilar con lupa sus principales negocios mayoristas en otros mercados -sobre todo, el español-.
El detonante de todo, que ha provocado una debacle en Bolsa para Telefónica, ha llegado tras el anuncio de que 1&1 Mobilfunk, subsidiaria de 1&1, haya acordado con Vodafone una asociación exclusiva de ‘roaming’ nacional a largo plazo en el que las partes se comprometen de manera vinculante a concluir una cooperación final en itinerancia nacional lo antes posible. Es decir, que pasa a ser su ‘partner’ mayorista para darle acceso a la red.
Así, la cooperación en ‘roaming’ nacional incluirá la prestación no discriminatoria de servicios mayoristas en áreas que aún no están cubiertas por la nueva red móvil 1&1 y comprenderá especialmente el acceso a la red 5G de Vodafone, incluidos los estándares móviles 2G y 4G, así como futuros estándares y tecnologías móviles.
En este contexto, Telefónica Deutschland ha querido salir al paso del contratiempo bursátil que ha provocado todo esto, y ha asegurado que «independientemente del anuncio» de cooperación entre Vodafone y 1&1, todavía existen «obligaciones contractuales» hasta el 30 de junio de 2025 que aseguran los flujos de ingresos de la filial alemana de la operadora española de telecomunicaciones.
Telefónica y su gran acuerdo
En el momento que ha estallado esta situación en Alemania, donde había una intencionalidad de tener relación a largo plazo con 1&1, tal y como anunciaron en 2021 cuando firmaron el acuerdo, ha surgido una sensación de desasosiego en Telefónica que, además, se ha visto reflejada en Bolsa.
Ante esta situación, que ha pillado por sorpresa a Telefónica, no existe margen para más sobresaltos. En España, el operador tiene dos grandes clientes mayoristas que, además, están en progresión de crecimiento. Se trata de Avatel y Digi. Sobre todo, el segundo.
El operador de origen rumano se ha convertido en socio inmejorable para Telefónica. Y es que, a pesar de su despliegue propio de infraestructura fija, a nivel móvil tiene la lógica dependencia de su mayorista, y también necesita de cobertura fija en determinadas zonas a las que Digi quiere llegar.
El acuerdo finaliza en 2026. Ambas partes, desde hace tiempo, muestran en público una gran cordialidad. Se trata de un ‘win-win’ para ambos operadores. De hecho, tal y como ha publicado ECONOMÍA DIGITAL, ambas compañías han conseguido reducir al máximo las quejas de sus clientes sobre el servicio que prestan.
Dicha confianza entre socios también se da en privado, donde ambas compañías hablan de una buena relación. No obstante, en dos años Telefónica deberá hablar con Digi, sentarse, y negociar las nuevas condiciones del contrato.
Para entonces el operador de origen rumano puede estar en una posición muy distinta a la actual. Y eso es esencial para el devenir de dicho acuerdo. Asimismo, tras el movimiento de Vodafone, habrá que estar a la expectativa de lo que haga en el mercado español.
Es cierto que el operador rojo hace años que ha decidido salirse del negocio mayorista. Así, en estos momentos, su gran cliente, Finetwork, se está dejando querer en público, y aseguró hace unas semanas que estaba abierto a cualquier posibilidad para tener un nuevo socio. Pero este giro en Alemania puede ser el anticipo de otros movimientos, por ejemplo, en España.