Villar Mir pasa la tijera a OHL (pero no convence a nadie)
OHL presenta un agresivo plan de ahorro para tapar unos resultados "decepcionantes", según los analistas. Cae más del 8% en bolsa
“Otro trimestre decepcionante”, lamentan los analistas. La constructora OHL anunció este miércoles que en el primer trimestre de 2018 perdió 144,9 millones de euros frente a unos beneficios de 8,3 millones del mismo periodo del año anterior. Y lo peor de todo: parece que el vendaval no ha pasado, por lo que la empresa presidida por Juan Villar Mir reducirá sus costes y venderá 280 millones de euros de activos.
Las cifras y el proyecto de reestructuración no convencieron a los inversores. La compañía se desplomaba más del 8% en bolsa a las 12 del mediodía tras alcanzar caídas superiores al 10% durante la jornada. La capitalización de la empresa se situó por debajo de los 1.000 millones y se hundió en mínimos anuales.
Inmersa en el espiral de resultados negativos, la empresa presentó también un plan hasta 2020 para convertirse “en una compañía de menor tamaño pero rentable”. Contará con dos vértices: vender activos y recortar costes estructurales, como los gastos de personal. El mercado tampoco lo consideró a la hora de moderar su opinión sobre la firma.
Ahora, OHL prevé deshacerse de la participación que tiene en el complejo turístico de Mayakoba por alrededor de 215 millones de euros y vender la filial checa ZPSV por 40 millones a lo largo de este año. Para 2019, quiere desprenderse de otros activos “no estratégicos” valorados en 25 millones.
OHL quiere reducir sus costes estructurales a prácticamente la mitad con un ERE y el abandono de países «no estratégicos»
En la presentación remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la constructora avisó de que se centrará en lo que sabe «hacer bien»: construcción y promoción de concesiones con el foco puesto en Estados Unidos, Europa y Latinoamérica, sus principales regiones de actividad.
Mientras, la empresa quiere reducir sus costes estructurales, de 240 millones en 2017, hasta un máximo de 134 millones. Ya tiene en marcha un expediente de regulación de empleo para 196 trabajadores y abandonará las operaciones que considere alejadas de sus mercados estratégicos.
Con los 280 millones ingresados, Villar Mir pretende financiar el ERE, que costará unos 100 millones; los proyectos fallidos que todavía se mantienen en cartera, por valor de 118 millones; y los 50 millones restantes destinarlos a la actividad industrial.
El paquete de medidas tiene el objetivo de llegar al año 2020 con unas ventas de 2.800 millones de euros frente a los 3.216 millones facturados en 2017. Además, quiere situar el Ebitda en el 5% de los ingresos y mantener el endeudamiento en los niveles actuales.
Los motivos de “otro trimestre decepcionante” en OHL
Antes de poner en marcha el plan estratégico, la compañía cerró un primer trimestre de 2018 con 144,9 millones de euros de pérdidas. Según explicó en un comunicado, las razones fueron el desfavorable tipo de cambio, los ajustes necesarios por la venta de la división de concesiones y las penalizaciones en relación a un proyecto en marcha en Guatemala.
Además, los ingresos cayeron el 7,9% debido al descenso de la actividad en la construcción y la ingeniería.