Vilarrubí, el politizador del Barça, conoce a la UDEF
El vicepresidente del área institucional del club es el hombre de confianza de Convergència en la primera entidad deportiva de Cataluña
Carles Vilarrubí i Carrió (61 años), el vicepresidente del área institucional del FC Barcelona, ha conocido este martes a la UDEF, la policía que ha registrado su vivienda en el marco de la operación judicial contra la familia de Jordi Pujol. Sin embargo, Vilarrubí ha alegado en un comunicado que se trata de «error» y que su abogado ya está trabajando en la confección de un recurso sontra la resolución que permitió el registro de su casa.
El directivo con un perfil más político del club, es el hombre de confianza de Artur Mas y Convergència en la primera entidad deportiva de Cataluña. El Barça, que presume de ser «més que un club», también vive días muy agitados por las sanciones de la UEFA contra las proclamas independentistas de sus aficionados en los partidos de la Champions.
Vilarrubí alcanzó una gran notoriedad en los años 80 y 90, gracias a su amistad con Pujol, ex presidente de la Generalitat, y Lluís Prenafeta, Secretario de la Presidencia de la Generalitat que en 2009 fue arrestado por la Guardia Civil en el marco de la Operación Pretoria contra la corrupción urbanística. Antes de dar el salto a la empresa privada, Vilarrubí fue nombrado director general de Catalunya Ràdio e impulsó las loterías de la Generalitat.
Consejero de Catalunya Comunicació
Vicepresidente de Rothschild España y presidente de Wills S&C, ingresó en la junta directiva del Barça en 2010, tras la victoria de Sandro Rosell. El padre del ex presidente azulgrana, Jaume Rosell, fue director general del club en los años 70 y, curiosamente, uno de los fundadores de Convergència Democràtica de Catalunya.
Vilarrubí también forma parte de los consejos de administración de Fira Barcelona, ONO, Grey Group y Catalunya Comunicació, la división de medios audiovisuales del Grupo Godó (8tv y RAC 1).
El Grupo Godó, propietario también de La Vanguardia y Mundo Deportivo, respaldó la candidatura de Rosell en 2010 y la de Bartomeu en las elecciones del pasado 18 de julio. Vilarrubí, además, suele utilizar estos medios para difundir sus mensajes sobre la actualidad barcelonista.
Amigo personal de Florentino Pérez
Vilarrubí, apodado Sir Charles por sus compañeros de la junta directiva del Barça, es el vicepresidente segundo del Barça tras la salida de Javier Faus, con quien nunca tuvo una buena sintonía. Amigo personal de Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, se especuló hace dos años con la posibilidad de que encabezara una candidatura a la presidencia del Barça. Vilarrubí retrocedió y se ha convertido en la cuota convergente que asumen Bartomeu y su junta directiva.
Vilarrubí siempre se ha posicionado a favor del derecho de decidir de Catalunya. También, el Barça. El 29 de junio de 2013, el club cedió el Camp Nou para el denominado Concert per la llibertat. Organizado por Òmnium Cultural y otras entidades de la sociedad civil como la Asamblea Nacional Catalana y la Plataforma Pro Seleccions Esportives Catalanes, congregó a 90.000 personas en el estadio azulgrana.
Crítico con la UEFA
El 11 de septiembre del mismo año, el Barça también abrió el Camp Nou para acoger la denominada Via Catalana. «El Barça es el mejor representante de Cataluña en el mundo y soy partidario de que el club esté siempre al lado del pueblo catalán», sostiene Vilarrubí, un apasionado de los coches y la hípica.
El vicepresidente responsable del área patrimonial, asimismo, se ha mostrado muy crítico con las dos sanciones que la UEFA ha impuesto a la entidad por la exhibición de ‘estelades’ y gritos a favor de la independencia de Cataluña. «Hemos intentado hacer pedagogía, pero la UEFA no entiende el ADN del Barça. El club no es propiedad de un oligarca ni de un empresario, sino de los socios», manifestó Vilarrubí, que este año recibió la Creu de Sant Jordi. «Es incomprensible que se pretenda que el club prohíba a sus propietarios que se expresen libremente. La UEFA no nos gusta y ahora no está autorizada moralmente para dar lecciones de nada», sentenció.